Con vocación de resistencia y la misma declaración de intenciones, el Portón del Jazz de Alhaurín de la Torre celebrará su decimoctava edición del 4 al 25 de julio en la finca del mismo nombre, entorno idílico donde los haya y en el que el certamen se ha convertido ya en referencia imprescindible del género. El cartel, presentado hace unos días en la localidad (en una velada que contó con la actuación de la banda ganadora del certamen local del año pasado, Calle Manouchette), reúne sólo cuatro conciertos que, sin embargo, responden tanto a la filosofía como a las aspiraciones internacionales del ciclo; así que, en un territorio como el de la provincia de Málaga, donde el jazz cuenta con cada vez menos apoyos y espacios, que el Portón siga dando guerra y buenas noticias constituye todo un alivio para los aficionados.

La edición de este 2014 presta, en tan limitada oferta, una especial atención al bajo como uno de los instrumentos que más y mejores maestros ha contado en las últimas décadas. El responsable de abrir el Portón el 4 de julio será el contrabajista, compositor y cantante israelí Avishai Cohen (quien ya visitó el Festival de Jazz del Teatro Cervantes de Málaga en 2008), visionario clave de la fusión y el jazz contemporáneo, fundador de su propio sello en Nueva York y aliado de músicos como Chick Corea, Bobby McFerrin, Danilo Pérez, Kurt Rosenwinkel, Alicia Keys y la London Philarmonic Orchestra. El día 18 subirá al mismo escenario el estadounidense Victor Wooten, consagrado por la crítica como uno de los mejores bajistas del mundo. Su trayectoria pasa por bandas como Béla Fleck and The Fleckstones (fundada a finales de los 80 junto al genio del banjo), Bass Extremes, Vital Tech Tones, Extraction y Thunder, el trío galáctico que montó en 2007 junto a otros dos ases mayores del bajo, Marcus Miller y Stanley Clarke (de quien incorporó la espectacular técnica del double thumb). Siempre arrimado al funk como causa mayor, Wooten promete para su noche en Alhaurín un éxtasis de ritmo, armonías, ácidas texturas y fusiones prodigiosas.

Antes, el 11 de julio, el Portón se vestirá de gala para recibir al Freddy Cole Quartet, liderado por el cantante, pianista y hermano de Nat King Cole. Forjado en discográficas menores durante los años 60 y 70, Cole fundó su propio sello en los 80 y gozó ya de un notable éxito en los 90, que se prolongó especialmente en el año 2003 gracias a su disco In the name of love, en el que grabó canciones que antes habían popularizado artistas como Van Morrison, Bonnie Raitt y Smokey Robinson.

Para terminar, el Portón del Jazz de Alhaurín de la Torre convoca el 25 de julio a The Wild Bunch, formación ibérica que rinde homenaje al Grupo salvaje de Sam Peckinpah y que se ha convertido en una de las sensaciones del jazz contemporáneo. En el quinteto, integrado por músicos españoles y portugueses, militan dos músicos malagueños: el saxofonista Enrique Oliver y el pianista José Carra. El trompetista Félix Rossy, el contrabajista Romeu Tristão y el batería João Lopes Pereira completan el line up de la agrupación, nacida en 2012 en el Begues Jazz Camp que se realiza todos los años y que dirige el músico Jorge Rossy.

De modo que, un año más, el Portón ofrece, en tan sólo cuatro conciertos, un recorrido notable por géneros, registros, veteranías, técnicas y espíritus. Otra oportunidad, al cabo, para volver a suspirar, como Geoff Dyer, But beautiful. Incluso, algo más.