Lamari cita a Málaga Hoy en Benalmádena, su tierra, para hablar de su nuevo disco, que saldrá a la venta este viernes. Nuevo Ciclo es un recorrido por nuevos paisajes sonoros que lejos quedan ya del flamenco-chill de la primera etapa de Chambao.

-¿Dicen que en el cambio está la evolución. ¿Es este el caso?

-Sí, aunque más que evolución yo creo que musicalmente lo que estoy haciendo es sumar. Se podría decir que se trata de una expansión musical. Todos mis gustos musicales e influencias están reflejados en el nuevo disco, aunque no en todos los temas. Y ahí es donde yo creo que está la evolución de Chambao, dentro de su propia expansión musical.

-¿Siente ahora el flamenco-chill como algo más ajeno?

-Me vienen muy buenos recuerdos de todo lo que ha pasado en estos 15 años atrás. Empezamos cuatro personas en 2001 y al resultado de aquella primera maqueta le llamamos flamenco-chill, que ni es flamenco ni es chill out, porque no sabíamos muy bien qué era, solo que era fusión. Pero creo que a partir del disco Endorfinas en la mente lo que hacíamos ya no era flamenco-chill o por lo menos no como lo que el grupo decía que hacía en el primer disco. Y así ha ido variando uno tras otro. Pokito a poko creo que es el disco más flamenco dentro de la fusión mientras que Con otro aire es un disco más mediterráneo, desde aires turcos hasta la propia Málaga. Hoy en día lo que intento hacer a nivel musical es aportar todo este tipo de música que me gusta y convertirlas en canciones, por eso en este nuevo disco hay folk, hay reggae y hay aires sureños como por ejemplo en Imagina. Se trata de sumar y expandir. Pero eso no quiere decir que me olvide de todo lo que hemos hecho.

-¿Ese giro podría suponer dejar a algunos seguidores en el camino?

-Yo creo que es un cambio, simplemente, porque mi voz sigue estando. No voy a hacer lo mismo que hacía antes porque ya está hecho. Entonces que por el camino se quede algún fan porque no le guste es obvio, igual que también pueden aparecer nuevos a los que lo de antes no les llegaba del todo y ahora esto sí. Yo no estoy en la cabeza de nadie cuando compongo una canción, sino que intento que esta sea libre, que no tenga juicios y que salga lo más pura posible desde dentro de mí.

-Lamari no es de escribir letras para complacer a nadie, sino que éstas vienen de experiencias vividas. ¿Qué nos puede contar de ese viaje en el que ha compuesto gran parte del disco Nuevo Ciclo?

-Este disco está hecho de varios viajes, de hecho cada canción me recuerda a un lugar distinto, desde Marruecos, Picos de Europa, Argentina, Uruguay… Cada vez me gusta más eso de cogerme mi mochila e irme sola de viaje porque te saca cosas muy buenas de ti, es precioso que cada persona intente hacer eso por uno mismo. Y algunas veces esos viajes se convierten en canciones. Por ejemplo la canción A veces se acabó convirtiendo en el himno de varios viajes por los Picos de Europa porque habla un poco del país de las nubes, ya que estaba en el quinto carajo de las montañas y miraba abajo y solo veía las nubes. Y resulta que es la canción más folk del disco. Tampoco sabía que tenía una folky dentro y la tengo. El disco en sí es muy liberador y como una especie de celebración de la vida, muy positivo.

-Entre el reggae y el folk también se ha colado un candombe.

-Lo incluyo porque dentro de este viaje, en Uruguay, conocí a la familia Núñez, a la que está dedicada la canción En la raíz, y qué mejor que a ritmo de un candombe uruguayo. Dentro de mi pecho, en cambio, es una chacarera argentina. En realidad esta canción nació como un tanguillo, que es muy parecido, hasta que empezamos a jugar con los ritmos y decidimos que tenía que ser una chacarera. Me parece un ritmo muy enriquecedor dentro de una canción de Chambao y en la que hemos contado con la colaboración de Jorge Drexler.

-¿Es este disco una búsqueda de identidad sobre qué es el verdadero Chambao?

-No, para nada. Yo no estoy en una búsqueda de mí misma sino más bien en una búsqueda de la felicidad, de qué es lo que me hace sentirme feliz. Por ejemplo, la canción Aquí y ahora habla mucho de esto, de salir de la zona de confort y centrarnos en el presente, en lo que te está ocurriendo, y saborearlo, desmenuzarlo, esa es la esencia de la vida realmente para mí.

-Es un disco repleto de colaboraciones.

-Desde la familia Núñez que hace candombe hasta Jorge Drexler a la guitarra a ritmo de chacarera, pasando por Ara Malikian al violín en La danza del tiempo; Xavier Rudd, cantante y compositor australiano del que soy fan desde hace tiempo, en Desde el origen; Juanito Macandé está en Imagina y Jorge Pardo en La mejor versión, que es la canción más reggae del disco. Y por supuesto Eduardo Cabrera, con quien ha sido muy divertido trabajar.

-¿Qué fechas hay a la vista para la gira de presentación?

-Mañana mismo [por hoy] partimos para Madrid para la promoción del disco que saldrá este viernes y el 22 de abril estaremos en la Fnac de Málaga. La gira empezará el 31 de abril en Viñarock, aunque me hubiera gustado arrancar en Málaga. No obstante, el 11 de junio estaremos en Fuengirola, en el Castillo Sohail, y me gustaría volver en septiembre u octubre para actuar en alguna otra sala. Y por último, el 17 de julio estaremos en Madrid en el festival de Cultura Inquieta. Mi idea para esta gira es hacerme más sitios pero en recintos más pequeñitos.