El área recreativa que el Ayuntamiento de Villanueva del Trabuco construyó en pleno monumento natural de la Fuente de los Cien Caños, ubicado en la Sierra de Caramolos que está catalogada como Lugar de Interés Comunitario (LIC), se encuentra en estado de absoluto abandono. Pese a haberse realizado sobre una zona protegida, haber supuesto un expediente sancionador al Consistorio por parte de la Junta de Andalucía y haber conllevado una importante inversión municipal, las intensas lluvias del pasado otoño han arrasado con todo y ahora no hay dinero para arreglarlo.

Así lo confirmó a este periódico el alcalde del municipio, Antonio Vegas, que dijo que "hemos tenido la mala suerte de que haya llovido mucho este año y los desperfectos han sido importantes".

El estado de abandono se aprecia con un mero paseo por la zona. Grandes cárcavas ocasionadas por las lluvias, árboles arrancados por la riada, y algunas mesas y vallas rotas. Todo lleva así desde las inundaciones que el pasado 28 de septiembre terminaron por desbordar el río Guadalhorce a su paso por este municipio. Pero el alcalde de Villanueva del Trabuco reconoció no poder hacer nada "hasta que consigamos financiación". Su intención es poder obtener alguna partida del plan de competitividad turística de la Sierra Norte de Málaga o del Grupo de Desarrollo Local de la comarca e "intentar recomponer este espacio durante este año".

El daño ambiental que supuso la construcción de este área recreativa y la inversión que las arcas municipales tuvieron que realizar, y cuya cantidad no fue precisada por el regidor, han servido de poco y habrá que empezar casi desde el principio. Lo primero será construir las escolleras para evitar que los terraplenes vuelvan a ser arrastrados si llueve con tal intensidad, una actuación que estaba proyectada por el Ayuntamiento para junio del año pasado y que no llegó a empezarse precisamente por falta de dinero.

El Ayuntamiento de Villanueva del Trabuco planeaba construir un parque multiaventuras en este monumento natural, declarado por la Junta de Andalucía en diciembre de 2011. Incluso después de que el Gobierno autónomico sancionara al propio Consistorio ese año tras la denuncia presentada por el Gabinete de Estudios de la Naturaleza de la Axarquía, GENA-Ecologistas en Acción debido a la obra realizada en monte público para hacer precisamente el área recreativa en una zona no autorizada. Los trabajos se llevaron a cabo en el entorno del paraje conocido como de los cien caños, donde el Ayuntamiento inició hace casi dos años un llamativo movimiento de tierra para el que se desplazó de forma irregular uno de los mojones que delimita el monte público de las parcelas de titularidad privada de la zona al menos dos metros.

Según el informe de denuncia realizado por los agentes de medio ambiente, una de las máquinas excavadoras que trabajaban en la zona desplazó el dado de hormigón durante la realización de varios bancales, a pesar de que estos elementos gozan de una gran protección y consideración jurídica por la legislación andaluza al marcar el deslinde.