La Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía tiene previsto dar su visto bueno al Plan Especial para el desarrollo del proyecto de Puerto Seco en Antequera de forma inminente, según informaron fuentes conocedoras del proceso. Este paso supondría un gran avance para este proyecto, que pretende convertir las proximidades de la Entidad Local de Bobadilla en un centro de recepción y envío de mercancías por ferrocarril, con los puertos de Algeciras y Málaga como puntos de entrada y salida de contenedores.

El visto bueno por parte de los responsables de Medio Ambiente del Gobierno andaluz podría hacerse oficial el viernes, fecha en la que está fijada una reunión entre el alcalde de Antequera, Manuel Barón, y la responsable de la Secretaria General de Ordenación del Territorio, María Nieves Masegosa, en la que el regidor tenía pensado abordar el retraso que se está produciendo en la tramitación ambiental del proyecto, lo que está ocasionando una importante demora en el desarrollo del mismo. De hecho, el Ayuntamiento de Antequera aprobó en su Junta de Gobierno de marzo el último cambio que se le solicitó por parte de los técnicos medioambientales, por lo que se esperaba que la aprobación del Plan Parcial se hubiese producido ya hace unos meses.

Una vez solventada la tramitación ambiental, el proyecto podría iniciar su siguiente y última fase, que pasa por obtener el visto bueno definitivo de la Consejería de Fomento, que es la responsable final. Una fase que iría seguida del inicio de los trabajos de este proyecto, que lleva ya ocho años de tramitación.

Aunque no existe una fecha concentra para que se produzca dicho paso, fuentes próximas al proyecto barajan enero de 2015 como una fecha probable para que el puerto seco de Antequera pueda ser una realidad administrativa, dando paso de este modo el inicio de los trabajos de construcción. No obstante, no es la primera vez que los plazos previstos no se cumplen y terminan produciéndose retrasos.

En este sentido, estas mismas fuentes explicaron que los inversores privados llevan cuatro años esperando este proyecto, aunque siguen manteniendo el interés en el mismo y su puesta en funcionamiento, dado el potencial que se considera que tendrá.

El desarrollo del puerto seco en su primera fase tiene previsto que conlleve una inversión de unos 35 millones de euros, lo que permitirá actuar sobre parte de las 356 hectáreas que engloba el proyecto. Estos trabajos se espera que puedan dar empleo a unas 1.000 personas durante su fase de construcción, mientras se estima que las instalaciones podrán dar trabajo a unas 7.000 personas cuando se encuentren plenamente desarrolladas y en total funcionamiento.