Condenan a dos trabajadoras por ejercer la podología sin titulación en Fuengirola

El Juzgado de lo Penal número 3 de Málaga ha condenado a dos trabajadoras de un salón de belleza de Fuengirola a una pena de seis meses de prisión para cada una por un delito de intrusismo profesional, al haber ejercido de podólogas careciendo de la titulación exigida, tras la querella presentada por el Colegio de Podólogos de Andalucía. Condena que el juez acuerda sustituir, al carecer de antecedentes judiciales, por doce meses de multa con una cuota diaria de seis euros, además de indemnizar al Colegio de Podólogos con 2.800 euros más las costas del proceso, y la inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo por el tiempo de la condena.

La sentencia, a la que ha tenido acceso este periódico, recoge que el Juzgado ha declarado probado el ejercicio de las falsas podólogas, regente y empleada de un salón de belleza, respectivamente, donde ambas encausadas realizaban distintos servicios de estética como manicura y pedicura para los que sí contaban con la titulación pertinente, y también servicios de podología como tratamientos de uña encarnada, tal y como anunciaban en su perfil de Facebook "pese a que ninguna de las dos está dada de alta en ningún colegio oficial de podólogos ni está en posesión de la titulación profesional necesaria". De esta manera, el documento concluye que se hacían pasar por podólogas "sin estar autorizadas legal ni administrativamente para ello con el consiguiente riesgo de mala praxis y perjuicio de terceros".

El Colegio de Podólogos de Andalucía ha mostrado su satisfacción por la sentencia, la segunda en un solo mes tras la condena a una falsa podóloga que ejercía en el municipio sevillano de Los Palacios. Estas se suman a otras dos el año pasado en la provincia de Almería, donde se dictó una sentencia con pena de prisión para un falso podólogo y otra de multa e indemnización. El Colegio Profesional mantiene actualmente abiertos otros 44 procesos por intrusismo en la comunidad autónoma, ocho de ellos en la provincia de Málaga. "Esta práctica ilegal de la profesión sanitaria no solo perjudica a los profesionales titulados y colegiados, sino que sobre todo pone en riesgo la salud de los pacientes, que en casos especialmente serios como el pie diabético puede derivar en grandes complicaciones cuando son tratados por individuos sin titular", señalan.