El argelino Sid Hamed Bouziane, interno del Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Málaga, que pedía asilo político, fue puesto en libertad después de que fuera suspendida la orden de expulsión, según informó ayer el abogado José Cosín. El documento de la Delegación del Gobierno en Andalucía señala que la resolución de expulsión se suspende "a fin de dar un plazo para que se ultimen las gestiones relativas al matrimonio" que contrajo el argelino el pasado sábado.

Desde hace varios días, miembros del 15-M permanecen a las puertas del CIE para reclamar que se le conceda el asilo político a Bouziane, que ingresó en el centro el 5 de agosto. La deportación del joven argelino de 28 años supondría, según los indignados, su "condena a muerte" porque sería encerrado por las autoridades del país o asesinado por radicales islamistas.