China consume el 90% del aceite con denominación Antequera

China es el principal consumidor de aceite de oliva virgen extra con denominación de origen Antequera. Un aceite de máxima calidad con un sabor frutado muy intenso, por encima de un 4,5 en cata en boca, y que ha conseguido enamorar a parte de los consumidores del gigante asiático en los que los productos de máxima calidad tienen una gran acogida. En concreto, el 90% de aceite que se vende bajo esta denominación tiene como destino china, mientras el consumo a nivel nacional no alcanza todavía el 8% del total y a los mercados no llega ni un 2%.

Al contrario de lo que ocurre con otros productos, como es el vino, las denominaciones de origen del aceite todavía no son muy conocidas por parte del consumidor, aunque aportan, igualmente, un márchamo de calidad y de un producto con unas características únicas. En el caso de Antequera se trata de aceitunas de la variedad hojiblanca que tienen que ser recogidas en la comarca (con la excepción de una localidad de Córdoba)y que tienen que tener una cata especialmente buena para que reciba dicha calificación, hasta el punto de que en la campaña 2017-2018 tan solo 178 toneladas de las 3.718 toneladas que optaron a dicha calificación la consiguieron. Un hecho que los responsables resaltaron como ejemplo de la máxima calidad que se exige a este aceite.

En este sentido, Esteban Carnero, portavoz de Dcoop, hizo hincapié en el crecimiento en ventas que viene obteniendo este tipo de aceite que en el último año experimentó un crecimiento de 101 toneladas a 136, un porcentaje que representa un ascenso “muy importante” aunque en número absolutos siga siendo un volumen muy pequeño. No obstante, la llegada a los lineales de grandes firmas y también su introducción en la hostelería, donde es muy demandado el aceite producido con una recolección temprana de aceituna, hicieron que se aumentasen las ventas con respecto al último año.

En cuanto a las previsiones para esta campaña, al igual que en el resto de la cosecha, se calcula que podría producirse una reducción de producción próxima a un 50%, aunque al haberse visto adelantada la maduración de la aceituna hizo que en los primeros momentos de la cosecha se pudiese recoger una cantidad importante de esta variedad en las condiciones óptimas para la producción de este aceite con características especiales.

Mientras tanto, en el campo las cuadrillas de aceituneros se afanan estos días por las dificultades añadidas que supone el agua que en estos momentos está cayendo en diferentes puntos de la comarca antequerana y que hace que en algunos olivares el barro sea abundante, lo que dificulta las labores de recogida, haciendo todavía más duro este trabajo.

Eso sí, la mecanización ayuda a realizar la recolección, con maquinaria encargada de vibrar los olivos para que suelten la aceituna o tractores equipados con sistemas que recogen los toldos que se van colocando bajo los olivos para facilitar la carga a los remolques que llevarán la producción hasta las almazaras para iniciar la elaboración del conocido como oro líquido. Un producto que en estos momentos también atraviese dificultades por los aranceles de EEUU.