José Perlas, entrenador de Nicolás Almagro, quien hoy reta a Rafa Nadal por un puesto en las semifinales de Roland Garros, dice de su pupilo que es, de todos los que han pasado bajo su tutela, el más receptivo a sus doctrinas, y aseguró que la prueba contra el tetracampeón de París será "una final".

Los dos se entrenaron ayer, por separado, en la misma pista. Nadal, primero con el júnior argentino Federico Coria, hermano de Guillermo, finalista en 2004 contra su compatriota Gastón Gaudio, y después Almagro, con el incombustible austríaco Thomas Muster, que cumplirá 43 años en octubre, campeón en el 2005, que ahora juega la prueba de veteranos.

Y los dos saben que el partido será complicado, a pesar de que Nadal ganó a Almagro en sus seis enfrentamientos, cuatro sobre tierra, y en especial el del 2008 aquí por un demoledor triple 6-1, cuando el murciano llegó eufórico a sus primeros cuartos de final de un grande.

El de Manacor sabe que Almagro ha sido el único jugador, junto con el letón Gulbis que le ha ganado un set en esta sesión de tierra y tanto él, como su tío y entrenador han tomado precauciones. "El partido será difícil. El rival está en muy buena forma. Cuando juegas cuartos de Roland Garros, no puedes esperar que sea fácil", manifestó Toni.

"Es una prueba de máximo nivel. ¿Quién mejor le puede poner a prueba?, nadie más que él. Es una final", dijo Perlas.