"Y con el número 41, Berni Rodríguez", así acabará Fede de Palma, el speaker del Carpena, la presentación del UCAM Murcia. Será un momento emotivo e intenso en el Carpena. Lo que nunca se pensó, ni Berni ni el aficionado ni el club, que fuera a suceder, acontecerá. El 12 años capitán del equipo jugará en el Palacio con una camiseta distinta a la verde que llevó 25 años, desde que entró con siete en Los Guindos. Pero así será.

La vuelta de Berni no quita foco, no debería, al trascendente partido de esta tarde. Antes y después, los honores al eterno capitán, pero durante hay un encuentro con peligro para el Unicaja. La dura derrota en Siena constató que el Unicaja no progresa en las últimas semanas, que se encuentra estancado en el juego, no se detectan avances tras un primer mes y medio ilusionante. Se ha encasquillado, ha dejado de defender con la fiereza que le hizo ser el mejor equipo en ese aspecto de toda la Liga ACB. Ha recibido 85 puntos o más en tres de los últimos partidos, causando senadas derrotas. Apenas el triunfo en Tel Aviv se ve como pico alto en el último mes.

Más allá de la evolución en el juego, el asunto va a la necesidad de resultados. El equipo marcha noveno (5-4), virtualmente fuera de la Copa. No ha ganado a ninguno de los rivales que están por encima de él en la tabla, hoy tampoco porque el Murcia está a un triunfo de la posición que ocupa, con un triunfo menos. Es un equipo interesante el murciano, con varios americanos jóvenes con proyección (Tillie, Gatens, Ragland o Marcus Lewis, máximo anotador del equipo). Además, el australiano Barlow o jóvenes españoles como Franch o Servera, otro jugador que pasó por la cantera del Unicaja y que, a sus 20 años, aún no ha perdido el tren pero parece lejos de las expectativas que despertó cuando Aíto le vio en un partido en Torre del Mar ante el Clínicas con 16 años y recomendó su fichaje. Tuvo destellos grandes con el Clínicas, pero ha menguado su trayectoria, por más que este verano ganara con Pepe Pozas y Abrines la medalla de bronce en el Europeo sub 20.

El Unicaja necesita progresar desde la defensa, es algo que parecen asumir todos los componentes del equipo, pero falta llevarlo a cabo. En ataque, como se encarga de repetir Repesa, el ensamblajer irá más lento. Pero cuando Marcus Williams no tiene el día, la capacidad se diluye. Calloway y Urtasun han bajado del gran nivel con el que comenzaron, Simon está más veces de las que falta. Hay que ver si Vidal va progresando físicamente y los pivots, salvo la exhibición infructuosa de Zoric en Siena, no acaban de ser determinantes como debieran por calidad y cantidad, por más que tengan algunas carencias evidentes.

Será el partido de Berni Rodríguez, pero es un duelo trampa, el margen de error para ir a la Copa se ha reducido casi a la nada.