La Copa Davis necesita una sede para albergar la final que enfrentará a España y República Checa entre el 4 y el 6 de diciembre y Málaga se postuló el pasado lunes como una de las alternativas a serla junto con Barcelona, Valencia y Tenerife. Pese a la competencia existente, sobre todo la que supone la presencia de la Ciudad Condal en la terna de aspirantes, existe optimismo en que la cita elija su campeón en la Costa del Sol. Así lo expresó ayer el concejal de Turismo y Deporte del Ayuntamiento de Málaga, Elías Bendodo. "Esperemos que la Real Federación Española de Tenis (RFET) tenga en cuenta que la final venga a Málaga porque es un evento mundial", aseguró un esperanzado Bendodo.

El edil analizó los adversarios que tiene Málaga en pos de acoger el choque entre españoles y checos, el cual significa la segunda final consecutiva para el equipo que capitanea Albert Costa. Bendodo considera que Barcelona es el principal enemigo de la candidatura costasoleña: "Es un gran rival sin desmerecer a Valencia, que es otra gran opción". Insistió en la fuerza de la propuesta catalana, aunque volvió a mostrar su optimismo en que Málaga sea la elegida: "Muchos tenistas son de allí, pero hemos presentado lo mejor que tenemos y esperemos que la RFET valore nuestra oferta".

Bendodo confirmó que la oferta malacitana contempla el Martín Carpena, que puede admitir a 9.000 espectadores, o el estadio de atletismo Ciudad de Málaga, que permitiría el asiento a 15.000 personas con la construcción de una grada simétrica a la actual, aunque no estaría cubierta, como informó ayer este periódico.

El Cabildo de Tenerife propone como sede el Estadio Antonio Domínguez del municipio de Arona; el Ayuntamiento de Barcelona plantea el Palau Sant Jordi de la Ciudad Condal, sede del España-Australia en 2000; y el consistorio de Valencia tiene dos opciones, el Velódromo Luis Puig y el recinto de la Feria de Muestras. La RFET anunciará su decisión este sábado.