El serbio Novak Djokovic asumió la responsabilidad de la derrota de Serbia ante Italia en las semifinales de la Copa Davis tras caer en individuales, donde desperdició tres bolas de partido, y en el dobles, por lo que califica la eliminación como una “decepción”.

“Personalmente es una gran decepción. Asumo la responsabilidad, habiendo tenido tres puntos de partido y estando tan cerca de ganarlo. Es realmente desafortunado. Pero esto es deporte”, dijo el número uno del mundo con gesto cabizbajo en su comparecencia pospartido. “A este nivel y contra uno de los mejores jugadores del mundo todo sucede muy rápido. Fue difícil leerle”, reconocio Djokovic, que lamentó no haber cerrado el triunfo y la clasificación cuando lo tenía todo para ganar a Sinner con el 2-6, 6-2, 5-4 y 40-0 en el último set.

“Cuando pierdes por tu país, el sentimiento de amargura es aún mayor”, añadió, en referencia al sabor amargo que le queda por no haber cerrado un año antológico con la segunda ensaladera para Serbia.

Djokovic cierra 2022 con la triple corona del Abierto de Australia, Roland Garros y Abierto de Estados Unidos, tres Grand Slams que no acompañó con Wimbledon por la derrota contra Carlos Alcaraz ni con esta Copa Davis que consideraba su guinda del pastel. Después de su doble derrota contra otro de esos jóvenes representantes de la nueva generación de tenistas, Jannik Sinner, solo tuvo palabras de elogio hacia el diestro italiano de 22 años.

“Tiene uno de los golpes de derecha más rápidos que vi, le da mucha potencia. Conozco su calidad, pensé que tal vez iba a bajar su nivel en dobles, pero no fue así. Jugó a un nivel altísimo”, subrayó Djokovic, que empieza ahora sus vacaciones tras no perder redondear un año magnífico.