El Marbella arrancó la temporada de la mejor forma posible: victoria en casa y portería a cero. Es un espectacular modo de ensamblar muchas de las caras nuevas que Fernando Estévez posee en esta nueva andadura en la disciplina marbellí. Los buenos comienzos siempre deben refrendarse con resultados fuera de casa.

Buscando esta fórmula trabaja Estévez en una próxima semana con una gran carga de partidos: "Tres partidos exigentes y de desgaste en los que nos jugamos mucho, así que si no hay cambios de inicio, los habrá durante el partido. Muchos jugadores van a participar en estos tres encuentros". Y es que el Marbella tiene prácticamente cerrada su plantilla con las últimas incorporaciones de Miguelito y Yael Ballesteros -que entraron en la convocatoria-, y las de Rafa Navarro y Héctor Otín, quienes llegaron esta semana. Este último lo oficializó el club marbellí en la tarde de ayer.

Otín, de 21 años, llega para fortalecer el extremo. El maño se formó en las categorías inferiores del Zaragoza, fue captado por la Juventus y llega cedido por el Virtus Entella italiano, cerca de subir el pasado curso a Serie A.

Sobre el filial cordobés, rival liguero de mañana, Estévez reconoció la necesidad de "tener el balón, porque si no lo vamos a pasar mal", así como la intención de "ser capaces de hacer lo que hemos hecho en pretemporada y manejar las transiciones". El técnico reconoció conocer bien a los cordobeses y llegar "con una idea de lo que podemos encontrarnos en el partido así como los puntos donde hacerles daño".