Fuerza en los tatuajes
Cook combina en su cuerpo mensajes referentes a baloncesto, religión y familia
"Baloncesto, religión y familia", responde Omar Cook cuando se le cuestiona sobre el sentido de los tatuajes que pueblan su cuerpo. Por él se extienden ocho diferentes con los motivos referidos, la tríada sobre la que asienta su vida. Es común ver en el baloncesto, sobre todo en los jugadores negros, tatuajes de todo tipo. No es sólo una moda, sino que Cook asegura que le dan fuerza y tienen un sentido vital.
En su bíceps izquierdo, la imagen que ilustra este texto, unas manos de apariencia divina sujetan un balón. "Mi vida está en sus manos. No puedo hacer sin él", reza la leyenda. Un poco más abajo, una cita bíblica, una referencia al salmo 23, aquel clásico de "El Señor es mi pastor, nada me falta...". En el antebrazo, un escudo heráldico referente a la familia. En el reverso, una cita que se inscribió cuando la NBA le rechazó después de haber sido un proyecto muy notable en la Universidad de St. John's. El salto a Europa fue, en su momento, casi una hecatombe. "Nunca te rindas, siempre ten confianza en ti", dice más o menos su inscripción, que le ayudó a convencerse de que otra vida es posible fuera de los Estados Unidos. "Nunca pensé que en Europa fuera tan feliz", confiesa. Un corazón con referencias a su esposa y su hija y otro tatuaje con el número 10, su preferido y que no puede vestir por la mayor veteranía de Cabezas, su compañero de posición, son otras perlas de la colección.
Con la energía positiva de sus tatuajes, Omar Cook afronta sus primeros play off en España. Será ante el Gran Canaria, un rival ante el que completó un excelso partido (13 puntos y seis asistencias más una defensa desquiciante sobre Mario Fernández y Marcus Norris) en el último duelo entre malagueños y canarios. Ahora, Cook habla de una historia diferente para la que el Unicaja se ha preparado mucho tiempo. "Se nos ha hecho larga la espera, es verdad. Nos hemos podido relajar, pero ahora es tiempo de estar excitado", asegura con la habitual reverencia con la que los jugadores norteamericanos hablan del tiempo de play off: "Llegamos bien. Estamos listos, llevamos tiempo preparándonos para este partido. No dependemos de un jugador, cualquiera puede decidir".
Sobre sus oponentes en la pista, Cook pondera sus cualidades: "Norris es muy agresivo en ataque, Fernández es alto y rápido y busca mucho el robo, pero nos hemos enfrentado varias veces y nos conocemos bien. Hay que ser agresivos, como ellos espero que lo sean sobre mí. Intentaremos hacerles estar incómodos, que no dirijan bien el partido".
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