La máscara protectora de la fractura ocular no es algo cómodo. Lo padece Jayson Granger, a quien la visión se le disminuye bastante cuando se la pone. Hoy decidirá si, tras algo más de práctica, se la coloca o juega a cara descubierta. La fractura está consolidando pero aún tiene la lógica falta de confianza para ir al choque. De todas formas, Plaza confirmó ayer que echará un cable: "Quiere ayudar como uno más. El equipo le necesita, no sabemos en qué tanto por ciento pero esperemos que esté".

Deportivamente, Granger habló de la trascendencia del duelo de hoy. "El primero puede ser el más importante o no. El año pasado el Gran Canaria pierde el primer partido y remonta la serie al Baskonia sin el factor campo. Jugar el primer partido en casa nos marcará un poco y si lo sacamos nos irá mejor", decía el base urugayo, que jugó dos partidos de play off en 2010 con el Estu.