Fútbol l Tercera División

Indolencia y esperpento

  • La peor versión del Atlético Malagueño cede frente a un Almería B muy discreto

Si hay dos palabras en el léxico español que definan lo presenciado durante la mañana de ayer en la Ciudad Deportiva de la Federación Malagueña son indolencia y esperpento. El primer término lo acuñó con ahínco el Atlético Malagueño, incapaz de hacer frente a un Almería B discretísimo, al que le bastaron dos disparos a la portería de Fran para volver a puestos de liguilla (0-2), grupo del que se caen los albicelestes, hoy sextos.

Lo de esperpéntico -"Hecho grotesco o desatinado", según la RAE- se lo ganó a pulso el colegiado granadino Alcaide Clavero, al desmarcarse con cinco expulsiones muy rigurosas. Se supo desde muy temprano que no iba a ser el día del Malagueño, los golazos visitantes sólo pusieron la cifra al fiasco. El juego comenzó trabado, el doble pivote Rafita-David González no se entendía y las alternativas se reducían a balones largos de la defensa para que Pedrito y Cala intentaran armar el ataque desde la banda. Un desajuste defensivo del Almería dejó a Cala sólo delante de Álvaro, el meta aguantó bien y el malagueño no acertó en el golpeo. Acto seguido, los locales reclamaron penalti en una falta de Chico sobre Juanmi que el colegiado se llevó fuera del área. En la siguiente jugada, un disparo ajustado de Prosi desde la frontal, que recogió un mal despeje de Jurado, le costó el 0-1 al filial albiceleste, corría el minuto 20.

El juego no mejoró en la segunda mitad, aunque el Malagueño encontró en Pedrito a un estilete que destrozaba continuamente la banda izquierda urcitana. El catalán, con Juanmi y Juanfri ausentes, dispuso de tres ocasiones francas para subir el empate, aunque siempre se topó con el acierto de Álvaro. En plena ofensiva malaguista llegó el 0-2 (70'). Así, una falta inexistente de Jurado sobre Babi, un placaje al borde de la legalidad que acabó con dos albicelestes en el suelo y una chilena de Cobos, desde el punto de penalti, cerraron un partido tosco y con poco fútbol.

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