¿Inicio o final de proyecto?

Con dos finales perdidas y una filosofía de juego ya asentada, el Athletic y Marcelo Bielsa deberán decidir en los próximos días si se trata del inicio de un proyecto a largo plazo o de un oasis en el fútbol del equipo vasco.

Después de una temporada en la que el equipo rojiblanco alcanzó y perdió las finales de la Copa del Rey y de la Liga Europa y adoptó un estilo de juego poco visto a lo largo de la última década, será tiempo de que el técnico argentino, el padre de la criatura, defina su continuidad.

"Hace un año, con Marcelo acordamos hablar de la renovación una vez que terminara la temporada. Si hace un año, él era la persona ideal, viendo cómo ha ido la temporada, puedo decir que Bielsa es nuestra única opción para el futuro", dijo el presidente del Athletic, Josu Urrutia. Bielsa diseñó una revolución en el Athletic. Gestó una renovación de la plantilla con la presencia de jóvenes como Aurtenetxe, Iturraspe y Muniain, como titulares indiscutidos, y apostó por un fútbol ofensivo y vertical. Pero el décimo puesto en la Liga y la pérdida de identidad en las finales disputadas contra el Atlético de Madrid y ante el Barcelona, respectivamente, levantan dudas en el entrenador.

La afición de San Mamés dejó en evidencia su postura respecto al futuro del banquillo de su equipo apenas unos minutos después de la derrota del pasado viernes cuando ovacionó a su entrenador al ritmo de "¡Bielsa, quédate; Bielsa, quédate!".

"El Athletic tiene espacio de crecimiento. Si me guío por las condiciones, creo que hay margen de crecimiento, pero también evalúo la sobreexigencia", dijo el Loco, el viernes. El futuro del proyecto está ahora en sus manos.