Juan Rodríguez lleva la felicidad a Riazor

Juan Rodríguez.
Juan Rodríguez.
C. A. Fernández (Efe) / La Coruña

11 de enero 2010 - 05:02

DEPORTIVO: Aranzubia; Manuel Pablo, Colotto, Lopo, Filipe Luis; Antonio Tomás, Sergio (Iván Pérez, 65'); Juan Rodríguez, Pablo Alvarez (Valerón, 60'), Guardado (Juan Domínguez, 74'); y Adrián. OSASUNA: Ricardo; Azpilicueta, Miguel Flaño, Josetxo, Monreal; Juanfran (Rúper, 69'), Nekounam, Puñal, Camuñas; Aranda (Galán, 62') y Pandiani (Masoud, 62'). Gol: 1-0 (49') Juan Rodríguez. Árbitro: Rubinos Pérez (madrileño). Expulsó a Nekounam (66') con roja directa por una dura entrada a Guardado. Amarilla a Juan Rodríguez, Lopo y Colotto. Incidencias: Unos 12.000 espectadores en el Municipal de Riazor.

El Deportivo acabó con su sequía de goles y victorias en Liga con un solitario tanto de Juan Rodríguez, que mantiene a los blanquiazules en la zona privilegiada de la tabla y mete en problemas a Osasuna, que se quedó con diez a los 66 minutos de partido.

Tras un primer tedioso, los locales desnivelaron la balanza a los cuatro minutos de la reanudación para reconciliarse con la victoria en el campeonato de la regularidad, que habían perdido de vista desde finales de noviembre.

Los deportivistas, que cedieron el dominio del balón a Osasuna en el centro del campo, aunque los navarros sólo dieron sensación de peligro en un par de acciones a balón parado en las que la defensa deportivista pasó tibios apuros.

El técnico blanquiazul, Miguel Angel Lotina, intentó acabar con la sequía realizadora de su equipo en Liga con la presencia en el once de Pablo Álvarez, el último que había visto puerta a mediados de diciembre, en detrimento de Valerón, pero las ideas en ataque de los coruñeses se congelaron.

El equipo coruñés echó de menos a los lesionados Riki, Lassad y Mista, y perdió la referencia de un delantero porque el asturiano Adrián López insistió demasiado en caer hacia la banda izquierda.

En el gol, Juan Rodríguez se permitió incluso girar sobre sí mismo en el área de Osasuna tras un pase de Guardado para batir con un potente disparo a Ricardo.

El gol entonó a los deportivistas y desestabilizó a Osasuna, en el que Camacho buscó la reacción cambiando de golpe a los dos delanteros titulares, el ex blanquiazul Pandiani y Aranda. De nada les sirvió a los pamploneses, que a menos de media hora para el final se quedaron con diez tras la expulsión de Nekounam.

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