López Gil se pone 'morado'

El pastel de la sexta etapa de la Vuelta a España, con principio y fin en Xátiva, tuvo varias porciones. El malagueño José Antonio López Gil, alias El Malagueta, se tomó una en forma de escapada que, pese a no llegar con vida a la línea de meta, le sirvió para ponerse morado, con el pastel, y con el maillot de la montaña obtenido en los altos de este sexto día.

Con el sampedreño la tranquilidad no existe en ninguna etapa. Aún con el termómetro echando fuego, este muchacho se inscribe siempre en la excursión del día. Le faltó tiempo al corredor del Andalucía para espabilar al personal. Todo un profesional de las fugas, con récord en 2008 con más de 1000 kilómetros escapado, se despegó de salida y se llevó a tres compañeros a su rebufo. Se arrimaron Aitor Pérez (Contentpolis), Bingen Fernández (Cofidis) y Matheus Pronk (Vacansoleil).

En el kilómetro 32, alcanzaron la máxima diferencia: 6.12 minutos. Sin problemas para el pelotón. Tan solo movió ficha el inagotable Columbia, para que no se les fuera de las manos una nueva victoria al frente. Como sólo llevan 77 en la temporada ... Así que la escapada se estabilizó en torno a los 4 minutos.

El Malagueta salió a pescar algo, no sólo una estéril paliza. Puntuó en cabeza en todos los puertos de la jornada, los Altos de la Muela, Millares y Beniganim, todos de tercera, por lo que arrebató el jersey de la montaña a Aitor Hernández. Subió al podio y es ahora el mejor escalador de la ronda. Un premio al esfuerzo. Y muy merecido.

La fuga pasó a la historia a 16 kilómetros de meta. Nacía otra etapa, con un tramo pestoso que aprovecharon para sorprender a los Columbia de Greipel. El maillot oro no relucía en cabeza, por lo tanto hubo margen para el descontrol. Una recta interminable, en la que apareció de manera portentosa un esloveno de 29 años que dio una lección de fuerza bruta. Encontró el sueño que perseguía. Era su quinta victoria de la temporada. Borut Bozic, del Vacansoleil, puso en su palmarés la primera victoria en la Vuelta a España al imponerse al sprint en la sexta etapa, disputada con salida y llegada en Xátiva, de 176 kilómetros de recorrido y sin cambios en la general, con el alemán Andre Greipel vestido de oro.

Bozic, que avisó en la tercera etapa holandesa de Venlo con un segundo puesto, acertó en esta ocasión y en una alarde de potencia en la recta de meta ganó la partida al estadounidense Farrar y al italiano Bennati.

Con el mismo tiempo del ganador, entraron los principales favoritos, prácticamente de la mano Valverde, Basso y Samuel Sánchez. Sin embargo, algunos se volvieron a dejar algunos segundillos, caso de Ezequiel Mosquera, y cómo no, los hermanos Schleck, abonados a los despistes en las llegadas. Poco a poco se alejan de la general.

Al menos, Greipel retuvo el maillot amarillo, por última día ante la llegada de la contrarreloj de Valencia, con el belga Tom Boonen, que sigue sin mojar, a 6 segundos y Bennati tercero a 9.

Un día de calor, que acabó con una media de velocidad de 37 kilómetros por hora. "La Vuelta empieza ahora y se sacarán las primeras conclusiones en los altos de Aitana y Xorret de Catí", coincidían los favoritos.