El Madrid gana por aburrimiento

Marcelo recordó la anhelada imagen de su compatriota brasileño Roberto Carlos, en el mismo escenario, el Nuevo Colombino, donde el Real Madrid dio un paso de gigante al título hace dos temporadas y que le sirvió en el presente para mantener con vida a su equipo, que aguanta el pulso al Barcelona.

El Real Madrid selló una nueva victoria en Huelva con protagonismo brasileño. Un gol decisivo de Roberto Carlos sobre la hora hace dos temporadas, la exhibición de Robinho la pasada campaña y un gol de Marcelo el día que le quitó la titularidad a Gabriel Heinze en su regreso al lateral. Saltó al césped del Nuevo Colombino el Real Madrid conociendo el nuevo recital del Barcelona. De jornada de la esperanza para reducir la distancia al líder, a presión máxima en un terreno donde las últimas temporadas ha cosechado triunfos repletos de sufrimiento.

De la imagen de poderío inicial pasó el Madrid a la de un equipo partido, con un jugador instalado en el regate como Arjen Robben que desespera a Gonzalo Higuaín o Huntelaar, cansados de esperar pases que nunca llegan. Corrigió errores en una segunda mitad seria, que sirve para batir récords al sellar el séptimo triunfo consecutivo a domicilio.

La forma de combinar en los últimos metros la mostraban tres jugadores con calidad como Camuñas, Sisi y Adrián Colunga, de gran movilidad pero poca pegada ante una defensa liderada por Pepe. El triunfo del Barcelona en Getafe provocó una salida en tromba madridista. Robben, cómo no en acción individual, creó la primera ocasión. Partió desde la banda derecha, dejando rivales a su paso camino del centro, hasta que chutó para toparse con Riesgo. El rechace no lo cazó Huntelaar por milímetros (min.8).

Ante la falta de disparos del Recreativo, Iker Casillas dio un pequeño susto a los suyos al no blocar un centro desde la banda, que dejó muerto sin que las consecuencias fuesen caras ante la ausencia de un rematador local. El guión se repitió en numerosas ocasiones durante el partido. Disparo de Robben y parada de Riesgo. Pero se marchó la primera mitad entre bostezos y desajustes.

No hay licencia para fallar para el Real Madrid y en la reanudación salió dispuesto a sentenciar. Fue el momento en el que Gago inventó un pase largo al hueco, Marcelo explotó su velocidad y definió con tranquilidad ante Riesgo. El gol quitó los nervios madridistas que comprobaron desde este momento la gran virtud de Riesgo como guardameta, sus manos a manos. Sacó uno a Huntelaar (52') y otro a Robbenminuto (73') y en medio frenó disparos de Robben y de Sergio Ramos Sólo las apariciones con mucha intención de Colunga hicieron intervenir a Casillas. Pero el Madrid y contuvo y sostiene el ritmo infernal del Barcelona.