El Málaga da en pantalla
málaga cf
La Rosaleda responde a la nueva exigencia televisiva: el club cubre el 92% en el tiro de cámara, cuando la LaLiga pide el 85%
Funciona mejor el horario del viernes que los sábados por la tarde
Los clubes están en plena adaptación. LaLiga viene cambiando el sistema futbolístico en múltiples aspectos y esa carrera obliga a todos a seguir las nuevas reglas del juego. El modelo televisivo representa una de las transformaciones más radicales, y el pasado verano ya incorporó novedades sorprendentes. El fin de que las pantallas de casa transmitan una imagen de que todos los campos estén llenos justifica todo el entramado de cambios. Dentro de ese panorama, la respuesta del Málaga está siendo positiva. Por el momento, los responsables del club hablan de "satisfacción" a la hora de enfrentarse a las incidencias que van ocurriendo.
Uno de los mayores retos para la actual campaña viene de la obligación de que los estadios de fútbol tengan buen tiro de cámara. Es decir, los dirigentes de la LFP pretendían que el 75% de los asientos que se vieran en la denominada U televisiva, que suele comprender las tres gradas que quedan enfocadas durante los 90 minutos de retransmisión -en La Rosaleda sería todo excepto Tribuna-. La medida, por muy novedosa, quedó algo ambigua. Después de varias asambleas, el reglamento final exige que el 85% de la grada considerada tiro de cámara esté ocupada. Eso sí, con un asterisco importante: computan para ello todos los abonados que tenga el club, independientemente de si van o no a los partidos. Bajar del 75% supone una amonestación; hacerlo por debajo del 50 implica sanciones importantes. En el caso del Málaga respiran tranquilos: contando con los socios que hay en los sectores de Fondo, Preferencia y Gol, está cubierto el 92% de esa U televisiva. Es de los equipos que más se acerca a la perfección.
Más allá de cumplir con la exigencia, el objetivo del Málaga es "no descuidar a la gente ni el estadio. Queremos ver el campo lleno, independientemente de lo que generen las televisiones", comenta Carlos Arias, responsable del departamento de Ticketing en Martiricos. Un reto que no es nada fácil, ya que la fragmentación del espectro televisivo ha dejado días y horarios muy nocivos para el fútbol. Sin duda alguna, el lunes es el peor. "Penaliza muchísimo", cuenta el dirigente blanquiazul, quien añade que, aunque pueda sonar increíble, los datos cotejados dicen que la gente "prefiere un viernes por la noche a un sábado por la tarde". Según Arias, es una respuesta social: si el fútbol es por la mañana -como ocurre los domingos-, luego permite hacer una serie de actividades posteriores en familia o con amigos; por la noche puede ser el plan final o el punto de partida para quienes tienen un plan nocturno. Por la tarde, no obstante, parte cualquier plan, y en el Málaga tienen claro que el sábado "es el día que la gente usa para socializar".
Si hay que elegir una parrilla, ahí está la dominical de las 12:00. "Es un horario muy, muy familiar", reafirma Carlos Arias, que guarda en la retina el 5-0 al Rayo Vallecano de hace dos temporadas, jornada que eligieron para celebrar el Día de la Infancia, en el que todo salió a pedir de boca. Los niños no sólo son el futuro, también el presente: "Lo bueno de los horarios tempranos es que alguien puede venir seguro con los niños, y que alguien quiera venir con niños habitualmente significa que lo hace con dos acompañantes".
Por ese motivo, en el Málaga están seguros de que el estreno en la parrilla del sábado a las 13:00, ante el Deportivo el próximo 26 de noviembre, dejará buenos registros. "A día de hoy, el flujo de venta no es de lleno absoluto pero va bien, puede estar en 22.000 o 23.000", aclara el jefe de Ticketing, que no obstante teme otro factor: "Málaga vive mucho de la hostelería, y en los pueblos se trabaja los sábados por la mañana. También suelen ser los partidos de los niños en el fútbol base".
Los datos de asistencia actuales dejan el público de La Rosaleda en 20.920 tras seis jornadas. "Comparado con el año pasado, es un incremento, no abismal, pero sí es evidente que equipos como Real Madrid, Atlético o Barcelona cuando vienen influyen mucho. Además, aún nos queda por hacer el Día de la Infancia", matiza Carlos Arias, feliz por la gran mejora con respecto a la segunda vuelta del año anterior. A todo pasado, tiene comprobado el motivos: "Aquí parece que si no sufrimos o nos jugamos algo, perdemos el interés. El año pasado estábamos en medio y no había partidos muy vinculantes. Esto ocurre en todos los sitios".
También te puede interesar