En la sala de prensa de La Rosaleda cuelgan dos cuadros con las imágenes de Manu celebrando las victorias en Europa sobre el AEK y el Leeds United. En aquella temporada (2002/2003) Manu nunca se imaginaría que cuatro años más tarde sería incluido en un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) por la delicada situación económica del club. Se fue lanzando duras críticas contra Fernando Sanz, pero cinco meses después de su salida, su tono es mucho más conciliador. "No guardo ningún rencor y al presidente tampoco. A mí este año me tocó vivir la cara más amarga del fútbol, pero yo me siento malaguista y espero que mi Málaga suba esta temporada junto al Hércules. La única pena es la forma en la que me marché".

Para el fuengiroleño durante su etapa en el Málaga vivió sus mejores años como futbolista: "Prácticamente he pasado toda mi carrera en el Málaga, para mí ese equipo significó la vuelta a casa después de que estuviera unos años en el Real Madrid. Jamás podré olvidar a ese club y lo mucho que me dio como jugador".

Ahora en Alicante ansía encontrar la regularidad en el juego que perdió en Málaga. "Las cosas me están saliendo bien, es cierto que en estos últimos partidos no estoy entrando en las convocatorias, pero desde hace un mes y medio he sufrido unos problemas respiratorios que me han apartado del equipo, pero ya estoy mucho mejor y espero entrar en la lista del sábado", asegura Manu, que alerta del potencial del Hércules: "Es un equipo configurado para volver a Primera con gente muy experimentada, como el Málaga. Tras un comienzo irregular las cosas no están saliendo mejor y ya estamos en los puestos altos".

Será un partido muy especial para él como lo prueba el hecho de que su entrenador, Andoni Goikoetxea, le ha solicitado informes sobre el rival: "Yo le he dicho que se trata de un equipo muy compensado y que arriba cuenta con dos jugadores muy peligrosos como son Baha y Salva, delanteros que pueden marcar en cualquier momento. Además, su centro del campo también está muy equilibrado y cuenta con un jugador como Antonio Hidalgo, con una gran presencia ofensiva".

Desde Alicante continúa viendo todos los partidos que puede a sus ex compañeros, con los que guarda una gran amistad: "Hablo casi todas las semanas con Goitia, Jesús Gámez y con muchos jugadores más. Yo al equipo lo estoy viendo muy bien y lo que pasa es que los siete primeros partidos que ganó no fue algo normal, pero estoy convencido de que el equipo peleará al final por el ascenso".