Oguchi Onyewu empieza a encontrar algo de continuidad. Debutó contra el Cacereño en Copa del Rey y en los últimos partidos ha tenido más protagonismo: Real Sociedad, Zenit, de nuevo Cacereño y hoy otra vez el escenario de la Liga de Campeones. Sin embargo, el americano todavía está bastante lejos del nivel que ofrecen tanto Demichelis como Weligton como para reñirle la titularidad. Llegó a haber chanzas hacia su figura en el partido copero cuando hizo un regate a un delantero extremeño. Sobre ello reflexionó el central ayer en conferencia de prensa: "Siempre no se puede jugar al cien por cien, como uno quiere. A veces no te sale. Pero yo soy mi primer crítico y sé cuando hago mal las cosas. Intento mejorar y hacerlo mejor, huir de lo negativo que me rodea a mí o al club y centrarme en buscar el lado positivo".

El último fichaje del Málaga en verano confía en que su rendimiento vaya a mejor a medida que vaya aclimatándose a todo lo que le rodea. "No es fácil. Como todo el que llega a un país nuevo, tienes una adaptación, nuevas costumbres, hay que conocer la Liga, a los compañeros. Estoy a gusto, no juego tanto como quiero, pero no me preocupo, hay que ir partido a partido. Espero jugar más en el futuro", deseó.

Por lo colectivo y, especialmente la revancha personal, Onyewu espera que surja el mejor Málaga para poner un broche de oro al estreno en la liguilla. "Para mí cada partido es importante. Queremos acabar bien la Champions, tal y como la hemos empezado. No estoy de acuerdo en que no sirvan para nada, yo siempre quiero ganar", dijo el americano, que regaló elogios a Isco, Toulalan y Eliseu y se congratuló por estar en Martiricos: "Soy afortunado de poder jugar en un equipo así, rodeado de tan buenos jugadores".