El 'Pao' es del pueblo

Ante los problemas económicos, el inversor Giannis Alafouzos mejoró las arcas vendiendo acciones del club a los aficionados · Quincy se reserva para la vuelta

Los jugadores del Panathinaikos, entrenándose ayer en La Rosaleda.
Los jugadores del Panathinaikos, entrenándose ayer en La Rosaleda.
Kostas Poulis / Atenas

22 de agosto 2012 - 05:02

Hace cinco años, el Panathinaikos era un club muy seguro económicamente, pero desde hace año y medio los problemas que le acechan cada vez son más serios. El año pasado cayeron en la segunda ronda previa de la Champions, frente al Odense, y eso supuso muchas pérdidas económicas para el club. Generalmente, tampoco ha habido buenas decisiones por parte de la directiva: traspasos demasiado caros y jugadores mal vendido. Poco a poco se fueron creando una serie de problemas que dejaron una deuda en las arcas del club que, el pasado verano, ascendía a 20 millones de euros.

Desde el pasado mes de mayo, hubo un cambio en la directiva. Un nuevo hombre de negocios llegó al club: Giannis Alafouzos. Él es propietario de Skai TV y está tratando de crear un modelo de club como los grandes españoles, Real Madrid y Barcelona. Diseñó un plan para entregar parte del club a los aficionados de todo el país, dejando que entraran como accionistas a cambio de una cantidad económica. Poco a poco, el club está yendo a mejor y hay menos problemas económicos, pero la situación ha repercutido mucho en lo que es, a día de hoy, el Panathinaikos.

UN VIEJO CONOCIDO

Jesualdo Ferreira fue entrenador del Málaga durante un corto periodo de tiempo, pero el peligro para el Málaga estará en el terreno de juego. Quincy es el último fichaje del club, aunque el año pasado ya estuvo en el Panathinaikos como cedido. Hace unos días se llegó a un acuerdo final con los cataríes del Al-Sadd, que se quedan con el 45% de los derechos del jugador y recibirán 400.000 euros si el club heleno alcanza la fase de grupos de la Champions en los próximos tres años.

El jugador tenía muchas ganas de quedarse en Atenas y, si bien fue un traspaso muy difícil, finalmente llegaron a un entendimiento. El ghanés llegó hace solo unos días a la plantilla, no siguió la preparación adecuada y físicamente no está preparado para el partido de ida. Por eso no viajó con el equipo, pero tiene opciones para el partido de vuelta. Podría estar entre los convocados y llegar a entrar en el segundo tiempo.

REFUERZOS

Quincy es el séptimo fichaje de esta temporada. Las seis incorporaciones que le preceden vienen marcadas por un bajo coste. Como el joven delantero Barbarouses, griego aunque con padres neozelandeses. Ibrahim Sissokó, cedido por el Wolfsburgo, fue una incorporación fantástica. Puede jugar tanto en la derecha como en la izquierda y es el que mejores impresiones dejó en verano. Habib Sow es un centrocampista defensivo que no ha jugado demasiado por problemas físicos. De hecho, no estará en La Rosaleda por una lesión muscular. André Pinto y José Manuel Velázquez son los fichajes de la defensa. El segundo procede del filial del Villarreal y jugará como titular hoy. Fornaroli es un hombre con mucha experiencia: Sampdoria, Recreativo, Nacional, San Lorenzo. Fue el penúltimo fichaje y firmó por tres años.

EL SISTEMA DE JESUALDO

La pasada campaña Jesualdo implantó un esquema de 1-4-4-1-1. Un sistema que el equipo asimiló muy bien y que lo llevó a practicar un juego muy atractivo. Pero la grave lesión de rodilla de un futbolista clave como Leto (no volverá hasta marzo) le hizo cambiar a un 1-4-2-3-1, donde Christodoulopoulos ocupa su puesto.

LA VUELTA DECIDIRÁ

Todos los griegos dan como favorito al Málaga, a pesar de los problemas económicos y de los jugadores que se han ido. Solo hay que ver que desde el 96, el Panathinaikos jugó 15 veces en España y perdió 14. Su único empate fue, precisamente, contra el Villarreal de Manuel Pellegrini. Es difícil jugar a un nivel tan alto, aunque la esperanza del equipo verde reside en obtener un buen resultado: un empate o una derrota con goles, por ejemplo. Transmitiría diferentes sensaciones porque la vuelta en el estadio Spyro Louis sería tremenda con la presión de más de 60.000 fans.

SIN PRESIÓN

Lo importante para Panathinaikos va a ser estar en Europa. La Champions da mucho dinero y sería lo mejor para el club. Aunque también estar en una competición, aunque sea la Europa League. Aun así, los verdes intentarán aprovechar su mayor experiencia en estas lides, y es que en los últimos diez años no han estado ni una temporada sin viajar por el Viejo Continente.

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