El rumor vuelve a sonar con fuerza en los mentideros de la NBA. Varios medios estadounidenses y españoles se hacen eco de un posible traspaso que ya llenó muchas páginas de periódico la temporada pasada y que amenaza con volver a hacerlo en la actualidad. Pau Gasol vuelve a estar en la órbita de los Chicago Bulls. La mítica franquicia de Illinois ha comenzado la temporada de manera frustrante. Diseñada para pelear por el título, a priori uno de los grandes equipos del Este, marcha en penúltimo lugar de la conferencia, sólo empeorado por los Miami Heat, con un balance pobre de 4-11. Los informes hablan de que necesita una mejora en la producción ofensiva del juego interior, posición en la que están Ben Wallace, Tyrus Thomas, Joe Smith, los rookies Joakim Noah y Aaron Gray, hombres muy físicos básicamente, más las aportaciones puntuales de Luol Deng y Andrés Nocioni, aleros que habitualmente juegan en la posición de cuatro para dar mayor poder ofensivo.

En Memphis, según apuntan varios medios de ambos lados del charco, han detectado que Pau Gasol no se adapta bien al nuevo sistema de Iavaroni. Sus números han descendido un peldaño, en puntos y rebotes, respecto a la temporada pasada. Incluso se aventura a señalar que la franquicia de los Grizzlies ha designado al jugador español como transferible. New York es otro equipo con el que se vincula a Gasol.

En la última madrugada, el pívot catalán firmó 14 puntos (4/14 en tiros de campo) y 15 rebotes en la derrota de su equipo (105-106) ante los Portland Trail Blazers de Sergio Rodríguez.