Regreso al esquema sin los extremos

Vicente del Bosque recuperará para la selección española el esquema utilizado en sus tiempos de entrenador del Real Madrid, y similar a algunos partidos de Luis Aragonés en la Eurocopa, ya que ante Estonia apostará por dos puntas definidos y prescindirá de los extremos puros, dejando las bandas para los laterales.

España dispone de un arsenal casi ilimitado de futbolistas que tratan bien el balón y no es fácil encontrar sitio para tanta calidad. Es uno de los problemas que tiene Del Bosque, aunque el seleccionador español lo recibe como una bendición.

El actual campeón de Europa jugará mañana en Estonia su tercer partido de la clasificación para el Mundial de Suráfrica, después de haber conseguido sendos triunfos en los dos anteriores partidos de la fase. Ahora afronta sus primeros partidos como visitante.

Del Bosque volverá a contar con los dos delanteros de la Eurocopa, Villa y Torres, después de que éste último se recuperara de una lesión muscular. Es una pareja temida en toda Europa y casi es obligación que jueguen juntos.

Así pues, la entrada en escena de Torres obligará a Del Bosque a modificar el dibujo táctico que utilizó en los dos anteriores encuentros, en los que actuó con un solo punta, que fue Villa. "Lo hemos hecho muy bien cuando hemos jugado con los dos. Con la calidad que hay en este equipo, podemos jugar como sea que todo está bien", afirmó ayer Marcos Senna.

Además, Capel abandonó la concentración por una lesión de adductores y Cazorla, otro futbolista de banda, está con algún problema físico. Buenas excusas para cambiar de esquema.

Por ello, Del Bosque tiene pensado alinear ante Estonia un centro del campo novedoso, sin futbolistas específicos de banda. Así, actuarían Senna y Xabi Alonso como ejes de la medular, con Xavi e Iniesta encargados de llevar el balón a los puntas. Del Bosque parece regresar así a los tiempos en los que entrenaba al Real Madrid, cuando utilizaba a jugadores como Zidane o Figo como centrocampistas con toda libertad de movimientos, sin ocupar específicamente ninguna de las bandas.

La utilización de la pareja Senna-Alonso sería otra de las pequeñas novedades introducidas por Del Bosque. Luis Aragonés, su antecesor, casi nunca la utilizó, pero a Del Bosque le gusta mucho Xabi Alonso y no quiere relegarle a la eterna suplencia.

La falta de extremos no implica que España renuncie a las bandas. De hecho, está obligado a utilizarlas ante un rival como Estonia, que previsiblemente se cerrará mucho en su área. Del Bosque quiere que los laterales, y especialmente Sergio Ramos, actúen casi como un atacante más. También usará a Iniesta cerca de las bandas, como tan brillantemente hace en el Barcelona.

Los jugadores no parecen impresionados con las variantes. "Aquí no hay titulares ni suplentes, somos un equipo. Me gusta jugar, pero si no me toca jugar, lo acepto", manifestó Marchena.