Santa Cruz acelera y Amrabat atempera

El Málaga necesita gol, la frase ya va camino de hacerse manida. La mayoría de las recetas apuntan a Amrabat y Santa Cruz, dos atacantes en el dique seco. Se hace imprescindible ver cómo se van desarrollando los entrenamientos día a día, porque en función de ello estarán disponibles antes o después. Ahora mismo el paraguayo parece ganar enteros para reaparecer el sábado.

La cuestión es que hay tanta prisa en recuperarlos como miedo a recaídas. No en vano, el propio Roque reconoció hace unos días en su país que aparte del esguince que había sufrido en un entrenamiento había recaído en su dolencia muscular, la rotura del músculo semitendinoso que lo tiene parado desde el mes de julio. Hace dos semanas andaba en un punto como el de ayer, su reintegración plena al trabajo completando las sesiones. Así que verlo al ritmo de los demás no es tampoco garantía plena de que vaya a viajar al Power8 Stadium. Si completa todo el trabajo de esta semana, como ayer, manejando buenas sensaciones, entonces Javi Gracia se planteará seriamente llevárselo a Barcelona. En caso contrario, se quedará aquí para seguir fortaleciendo y pensando en tener contra el Granada sus primeros minutos de esta campaña.

Parecía que Amrabat llevaba mejor camino que el internacional paraguayo, aunque están siendo mayores sus ganas de regresar que la carga de trabajo que le andan poniendo los servicios médicos. En la jornada de ayer volvió a trabajar en solitario (acompañado de Juanpi Añor, que última su puesta a punto tras varias molestias musculares en el abdomen) yendo paso a paso. A sus allegados les comentó que se veía en buen tránsito para llegar a tiempo al partido del sábado, aunque con sólo cinco sesiones de trabajo por delante y aún sin añadirse al grupo suena bastante complicado que pueda estar el sábado. Seguramente sí dé el paso adelante de ejercitarse con los demás, pero lo más prudente, al menos así se maneja en el vestuario, es que continúe adquiriendo buen tono para llegar más fuerte aún al choque de la próxima semana en La Rosaleda, también vital para los blanquiazules.