Tiempo para reírse (77-68)

La rutina de la victoria en la ACB no debe quitarle valor a la tremenda temporada del Unicaja. Esta continuidad en el triunfo se valora más cuando se viene de una etapa en la que esperaba un gatillazo en cualquier esquina, ante el rival más insospechado. La loable regularidad que ha conseguido en la competición nacional Joan Plaza merece un aplauso enorme. El Unicaja tumba a rivales a un ritmo que sólo aguantan los gigantes. Y con distancia a favor malagueña. Tras dos derrotas consecutivas, en Copa y en Euroliga, algo poco visto esta temporada en el Unicaja, regresó la versión liguera, tan sólida. Con la versión pistolera de Kuzminskas y Toolson, con una creciente fiabilidad en el triple, con la ratificación de que se puede ganar en muchos registros diferentes.

Trufada con alguna mala noticia, como la lesión, parece que puede llegar al mes de baja, de Vasileiadis, la victoria del Unicaja ante el Gran Canaria (77-68) mantiene la sonrisa en el rostro del aficionado del Unicaja, al que una victoria así le reconforta. Y es que Aíto García Reneses despierta las pasiones más bajas del Martín Carpena, el público se motiva y el ambiente se caldea. El poso que dejó el técnico madrileño en el Martín Carpena fue malo, seguramente peor de lo que fue realmente su trayectoria. Pero ese tiempo muerto ante, precisamente, el Gran Canaria en su último partido en Málaga cuando el equipo perdía por 20 puntos a falta de pocos segundos dejó huella. El público se lo recordó en los instantes finales, con el partido ya decidido. Tiempos de risas.

El equipo amarillo encaró el partido con muchas ganas y bastante energía, con una agresiva defensa a toda pista que dificultaba la subida de balón del Unicaja, que metía mucho entre Kuzminskas y Toolson (30 puntos entre los dos al descanso) para solventar esos problemas. Pero no se encontraba cómodo el Unicaja, que vio cómo el finés Salin encadenó nueve puntos consecutivos para darle una renta de cinco puntos (17-22). Un alero temporero pulido en la académica escuela de Olimpija de Ljubljana que está dejando buen regusto en su primera experiencia en la ACB. Paralelamente, lesión de Kostas Vasileiadis en medio de una jugada. El griego no tiene suerte esta temporada con las lesiones, cuando da síntomas de alcanzar la plenitud física y gana peso en los ataques se ha roto.

El panorama no era muy halagüeño pero el Unicaja muestra en la ACB una inmensa capacidad de manejar los partidos, de oportunismo bien entendido para virar tendencias. Y Fran subió el diapasón, unido a un Kuzminskas con minutos para correr con la lesión de Suárez, para firmar en un parpadeo un 10-0 de parcial. Un par de técnicas al Gran Canaria hicieron pupa. Ciertamente, no jugaba mal el cuadro canario, pero se le salieron tres de dentro mientras que el Unicaja, henchido de confianza, se encomendaba al cierto de Toolson y Kuzminskas. Es complicado en un equipo de Plaza ver la concentración de anotación en tan pocas manos, pero no se puede decir que fueran lanzamientos forzados, sino un ataque fluido. Y las lesiones de Suárez y Vasileiadis propician que también aumenten sus minutos y su confianza. Fue un segundo cuarto demoledor (25-11) en el que se fraguó el triunfo.

Al descanso dominaba el Unicaja (42-30) con bastante autoridad para lo que se había contemplado en el parqué. Suele ser un riesgo, constatado este temporada en partidos dispersos y recalcado por Joan Plaza, ganar distancia antes de merecerla por el humano abandono de las obligaciones defensivas cuando en ataque hay puntería. Era el principal peligro al que se enfrentaba el Unicaja tras la reanudación. Pero, como recalcaba el técnico catalán tras el partido, los cuartos malos se van sustituyendo por minutos malos, se van limando las dispersiones y ello repercute en la holgura de los triunfos ante rivales que no exigen esa tremenda continuidad durante 40 minutos, véanse los casos de Barcelona y Olympiacos en la semana anterior. Ante ellos sí hace falta subir un escalón. En el que se encuentra ahora el Unicaja sí le basta para ganar a 16 equipos de la Liga ACB con cierta solvencia.

Con, otra vez, grandes minutos de Germán Gabriel, el segundo tiempo transcurrió cuesta abajo porque el Unicaja supo mantener el mínimo nivel de intensidad siempre. Interesante adición la del malagueño. Con 16 puntos de distancia tras canasta de Kuzminskas (52-36), el equipo malagueño sólo vio bajar ya la renta de los diez puntos en el minuto final, con todo decidido y con la guasa en la grada. Hay licencia para reír ahora. Y hay que disfrutarlo.

Ficha técnica:

77 - Unicaja (17+25+18+17): Markovic (2), Toolson (18), Kuzminskas (19), Thomas (3), Golubovic (6)- cinco inicial- Gabriel (7), Granger (8), Stefansson (4), Vasileiadis (-), Vázquez (10) y Green (-).

68 - Herbalife Gran Canaria (19+11+17+21): Bellas (9), O Leary (9), Newley (10), Kuric (6), Tavares (4)- cinco inicial- Oliver (5), Urtasun (2), Pauli (-), Summers (4), Salin (12), Báez (1) y Kendall (6).

Árbitros: Pérez Pérez, Calatrava, Caballero. Señalaron técnica al jugador del Herbalife Brad Newley, minuto 14, por protestar.

Incidencias: Partido correspondiente a la vigésima segunda jornada de la Liga Endesa ACB disputado en el Palacio de los Deportes, José María Martín Carpena ante 7.500 espectadores.