El Trops Málaga comenzó la liga de la mejor manera posible. Y es que el máximo representante masculino de la capital, que milita en la División de Honor Plata, se estrenó este sábado ganando ante un buen rival, el Eón Horneo Alicante, ante su afición y por un resultado importante, 24-19, lo que deja a las claras la superioridad manifiesta mostrada ante su adversario.

Con este marcador, el Trops suma sus dos primeros puntos y se coloca líder de la categoría, aunque se trata de un puesto testimonial cuando se lleva jugado solo una jornada, y aguarda el siguiente compromiso del próximo sábado, en el pabellón Fernando Argüelles de Antequera (19.00 horas), frente al Balonmano Los Dólmenes, que supondrá el primero de los dos derbis ligueros que se disputarán esta temporada.

En cuanto al desarrollo del duelo entre el Trops Málaga y el Eón Alicante, lo cierto es que el partido arrancó muy eléctrico. De hecho, todavía no se había alcanzado el primer minuto y el Alicante ya había inaugurado su casillero, tras la diana de Novais desde los siete metros. Las acciones de gol se sucedían en uno y otro campo, mientras que el marcador se iba renovando con suma rapidez, aunque la igualdad, en realidad, estaba imperando y con Karlov en estado de gracia en la faceta anotadora, con tres de tres. Eso sí, a partir de aquí, con el 3-3 en el electrónico en el 03:51, el Trops se fue despegando hasta poner el 6-3 en el 8:31, merced a un parcial de 3-0, con goles de Alberto Castro y el extremo Jesús Melgar, por partida doble.

Con este resultado, el conjunto malagueño se hizo dueño y señor del encuentro. Prueba de ello es que el juego se fue aplacando. Ya no había la velocidad y las acciones alocadas del comienzo, porque, sencillamente, el Trops había conseguido controlar la situación para llevarse el envite a su terreno y, por si fuera poco, la sombra del portero Villamarín era cada vez más alargada hasta convertirse en el mejor jugador del duelo en lo que se llevaba disputado.

La renta de tres dianas se mantuvo hasta los últimos diez minutos del primer acto, pero el Trops, con su juego combinativo, no se conformaba y seguía apretando para aumentarla. Así las cosas, en el 23:46, el cuadro malacitano ganaba por un claro 11-6 para alegría de la afición local que se dio cita en el pabellón del colegio Los Olivos. Sin embargo, en los últimos compases del primer tiempo, el equipo malagueño se atascó en ataque y, lastrado por las exclusiones –jugó con un jugador menos prácticamente los últimos cinco minutos–, el Eón Alicante aprovechó la situación para remontar y ponerse a dos (11-9) al final de los primeros 30 minutos.

Reanudado el juego, tras el descanso, el encuentro cogió el rumbo de los últimos instantes de la primera mitad. Es decir, con el Trops con menos intensidad defensiva y con el Eón Alicante con mucha hambre, después de ver que el partido se le estaba poniendo de cara. Así, aunque el joven Diego Pérez inauguró el segundo tiempo a los 36 segundos (12-9), los alicantinos lograron un parcial de 0-2, por medio de su máximo goleador Martín Ariel y Salgado, que hicieron saltar todas las alarmas al ponerse el marcador en un estrecho 12-11 en el 07:14.

El técnico malagueño Quino Soler no paraba de gritar a los suyos para que no se bajara la guardia y pedía concentración. Este recado surtió efecto y de qué manera, ya que el Trops volvió a rearmarse para abrir de nuevo la brecha con el 18-13 recién alcanzado el ecuador del segundo acto. El incombustible Melgar, de una acción rápida, había anotado el último gol, tras el robo de balón de Javi García en el centro de su campo y el pase largo de Luis Castro. Un contraataque eficaz, de apenas unos segundos, que levantó al público y obligó al experimentado técnico del equipo alicantino, Fernando Latorre, a solicitar tiempo muerto.

La reacción malacitana había llegado para quedarse. El Trops Málaga se mostraba solvente ante un buen rival, que no bajaba los brazos, pero los locales habían reconducido su juego de ataque, mientras que los visitantes erraban una y otra vez los lanzamientos desde los siete metros.

La mayor renta del partido llegó en el minuto 24:24, cuando el jovencísimo Jesús Arca colocó el 23-16 en el electrónico. Con este resultado, el conjunto de Málaga ya tenía la victoria asegurada, pero ahora se jugaba por la diferencia de goles cara al duelo de la segunda vuelta.

El Eón Alicante tuvo un arreón final para maquillar el marcador, consiguiendo un parcial de 0-3 cuando el cuadro malacitano jugaba con un jugador menos, por la exclusión del pivote Cabrera, pero, una vez más, Karlov anotó para los suyos, poniendo el 24-19 del final del encuentro y su séptimo en su cuenta particular.