"El césped parece una pista de hielo y así es imposible"

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Pellegrini criticó duramente el estado del campo y pidió "soluciones rápidas" para mejorarlo

Pellegrini, en el banquillo minutos antes de que diera comienzo el encuentro.
Enrique Salvatierra Málaga

20 de enero 2013 - 05:02

Descontento, como pocas veces se le ha visto. Así se mostró Manuel Pellegrini tras el empate que cosechó el Málaga ante el Celta en la noche de ayer. Y no fue por motivos deportivos. A su equipo le faltó "sentenciar cuando estuvimos por delante en el marcador. Tuvimos ocasiones para haberlo hecho, pero no convertimos". Pero la causa del enfado del técnico chileno era el maltrecho césped de La Rosaleda. Una vez más, los jugadores malaguistas protagonizaron numerosos resbalones que impidieron la práctica normal del fútbol. El técnico malaguista fue muy crítico con la situación y pidió soluciones rápidas. "El estado lamentable de la cancha nos está lastrando mucho a la hora de intentar practicar nuestro juego. El césped parece una pista de hielo y así no es puede. Es muy difícil jugar al fútbol en estas condiciones. Nos quedamos con la sensación de poder haber hecho algo más", señaló.

Incluso, evitó excusarse en el viento para focalizar su crítica sobre el césped. "Hacía un poco de viento, pero lo del césped es una urgencia porque así no se puede jugar. Los jugadores están cayéndose todo el partido. Pero la solución no la tengo que dar yo, la tiene que dar el encargado de ese aspecto. Lo único cierto es que no se puede seguir así", añadió un Manuel Pellegrini al que pocas veces se le había visto tan crítico con el club.

Sobre el partido, lamentó no haber sumado "tres puntos importantes. Nos vamos con sensación de malestar. Pensábamos sumar estos tres puntos en casa. Eran importantes para seguir arriba. Sabíamos que esperaba un rival al que le gusta jugar, pero ese aspecto lo controlamos. Echamos en falta haber concretado la victoria cuando nos pusimos por delante. Aunque, si no se puede ganar, mejor empatar que perder el partido".

La relajación que se vio en el equipo con el marcador a favor parecía indicar que ya se estaba pensando en el partido de Copa ante el Barça, pero el chileno descartó esa opción en su valoración. "Intentamos estar centrados en el Celta. La Liga es lo más importante y aún tenemos 4 días para preparar el partido. El equipo estaba fresco pero no tuvo creatividad", analizó. Ahora, toca centrarse en el duelo del jueves: "Tenemos una bonita oportunidad para pasar de ronda ante un gran rival. No importa lo que haya hecho el Barça".

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