Esa confianza en... los demás

A poco que uno rasque en esta Liga tan descompensada, aflora un dato para el sonrojo. Un ejemplo más: Cristiano Ronaldo y Messi suman entre los dos 62 goles (32 el portugués y 30 el argentino), prácticamente un tercio más que el equipo que más tantos ha marcado en la Liga de los demás, el Athletic Club (42). Para que el buen equipo de Bielsa o el Valencia, que le sigue en esa relación con 40 dianas, lleguen siquiera a esa cifra provisional que acumulan los dos mejores jugadores del mundo -registro que sin duda rebasarán-, deberán superar la veintena de tantos en 12 partidos, lo que no les resultará fácil...

Los datos que revelan la distancia sideral entre el binomio Madrid-Barça y el resto darían para una tesina de matrícula de honor, con un apartado especial para el doble rasero arbitral. Por eso conviene analizar a los colosos en su mundo de opulencia, prebendas y privilegios, y a los demás en el suyo, mucho más prosaico y terrenal. Hoy toca mirar al cielo y desglosar si el calendario alimenta las esperanzas del Barcelona en cazar al Madrid. Siempre con la premisa, claro, de que los barcelonistas sean capaces de derrotar a los blancos en el Camp Nou en la jornada 35ª. Si no es así, cualquier debate sobra.

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El trayecto hasta ese clásico en la Ciudad Condal depara más celadas a los líderes que a su perseguidor. Eso dice la teoría. En esas siete jornadas previas, el Real Madrid recibe al Málaga, la Real Sociedad, el Valencia y el Sporting. Los malaguistas bajan mucho como visitantes, pero van a más y ese cuarto puesto provisional les debe armar de confianza; además, esa visita viene precedida del partido de mañana ante el CSKA de Moscú, esa vuelta de octavos de final de la Champions en el Bernabéu que los blancos deben resolver tras el 1-1 de la ida, y del esfuerzo que deban hacer los merengues ante los rusos dependerá si el Málaga tiene opciones de plantarle cara cuatro días después.

No obstante, hay más posibilidades de que aumente la ventaja del Real Madrid la próxima jornada a lo contrario: el Barcelona visita el Ramón Sánchez-Pizjuán, y el Sevilla, que es el único equipo que ha logrado puntuar esta Liga en el Camp Nou (0-0), ya fue capaz de frenar a los azulgrana la pasada Liga (1-1).

En las dos siguientes jornadas, lo normal es que los dos aspirantes al título hagan lo que hacen casi siempre, ganar: en la jornada 29º, el Madrid viaja a Villarreal -casi siempre ganó el Madrid cuando el submarino amarillo era pujante, más ahora- y el Barça recibe al Granada; en la 30ª, la Real Sociedad va a Chamartín y el equipo de Guardiola se desplaza a Mallorca.

A buen seguro que los barcelonistas tienen subrayada en rojo la jornada siguiente: la puerta a la posibilidad de recortar algún punto se reabre. Ir a Pamplona nunca fue fácil para el coloso blanco, y en esta ocasión lo será menos: a la competitividad del equipo rojillo de la mano de Mendilibar se une que ese partido se incrusta entre la posible eliminatoria de cuartos de final del máximo torneo continental, casi nada. Obviamente, el sorteo del próximo viernes en Nyon también influirá: no es lo mismo que el Madrid se vea emparejado con el APOEL que con el Bayern, el Inter, el Chelsea o el Nápoles. El sorteo será puro. Pero el Barça no debe descuidarse esa misma jornada: recibe al Athletic, un equipo muy peligroso... aunque también vaya al Camp Nou pendiente de resolver un posible cruce de cuartos en la Liga Europa.

Tras ese fin de semana, quedarían tres jornadas más hasta el Barça-Madrid. Y si los barcelonistas cuentan con muchas posibilidades de sumar un nueve de nueve en ese tramo (Zaragoza fuera, Getafe en casa, Levante fuera), los madridistas reciben al Valencia, van al Calderón y les llega el Sporting.

La visita del Valencia viene justo después de la vuelta de los cuartos de final de la Liga de Campeones, fase en la que el equipo de Mourinho es más que probable que se meta, y el Atlético de Simeone pondrá argumentos para intentar cortar esa interminable racha de partidos sin ganarle al vecino.

Luego vendrá el clásico... emparedado entre las semifinales de Champions. Si ambos se vuelven a cruzar en Europa, a ver quién de los dos sale más tocado de ese trío de partidos para afrontar las cuatro últimas jornadas. Y también en esa recta final el Madrid lo tiene peor: Sevilla y Mallorca en casa, Athletic y Granada fuera; más asequible es recibir a Málaga y Espanyol y viajar a Vallecas y al Villamarín, lo que hará su perseguidor.