El futbolista malagueño Carlos Aranda está entre los detenidos por la Policía Nacional por pertenecer a una organización criminal presuntamente dedicada al amaño de partidos de Primera y Segunda División con el objetivo de obtener beneficios en apuestas deportivas.

Según fuentes policiales, los detenidos utilizaban a familiares directos para realizar las apuestas en el fútbol, y en ese punto, uno de los investigados es, precisamente, el padre de Carlos Aranda, de 39 años y una dilatada trayectoria en el fútbol nacional.

Así, en esta operación han sido arrestados fubtolistas de varios clubes, entre ellos, el malagueño Carlos Aranda, exjugador de numerosos equipos de Primera División. Pero también a Borja Fernández, jugador del Real Valladolid Club de Fútbol recientemente retirado; Samuel Saiz Alonso, actual futbolista del Getafe y ex del Huesca, e Íñigo López Montaña, actual jugador del Deportivo de La Coruña y exjugador del Huesca. Raúl Bravo, exjugador del Real Madrid o Rayo Vallecano, sería el supuesto cabecilla de la organización.

Según publica el diario El Mundo, la investigación se centra en las últimas jornadas de Primera y Segunda División de la temporada que acaba de finalizar, aunque a la Segunda todavía le quedan dos jornadas más los playoff. Todo parte de una denuncia realizada por la Liga de Fútbol Profesional (LFP) el año pasado sobre un Huesca-Nàstic, informa Pablo Herráiz.

Las fuentes de la investigación han precisado a Efe que se prevén once detenciones y que los agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) han iniciado también varios registros, uno de ellos en la sede de la Sociedad Deportiva Huesca.

El origen de esta operación policial, que se desarrolla desde primera hora de la mañana, está en una denuncia de LaLiga en mayo de 2018 a raíz de las presuntas irregularidades detectadas en el partido que disputaron el Huesca contra el Nástic de Tarragona y su relación con las apuestas deportivas de este encuentro.