Holger Rune, la amenaza de España que creció en Málaga y tiene fama de donjuán

Holger Rune (Gentofte, Dinamarca, 2003) es la gran amenaza de Dinamarca en esta eliminatoria de Copa Davis que se disputa en Marbella. No es la Costa del Sol un lugar desconocido precisamente para el actual número 11 del mundo, que ha llegado a estar en el cuarto puesto de la ATP. Él sí ha aceptado el reto de, tras la gira americana, bajar al fango, cambiar a la arcilla y conseguir el reto histórico para su país de estar entre los ocho mejores del mundo por primera vez.

Holger Rune, con 13 años, en los Pinares de San Antón.

El caso es que Holger Rune ha estado ligado a Málaga con bastante frecuencia. Desde pequeño ha pasado tramos de su formación a la provincia y ha vivido periodos de su vida por aquí. Como muestra en sus redes sociales, haciendo flexiones cuando tenía 13 años en la zona del tranvía, con los Baños del Carmen al fondo, bañándose en la playa o entrenando en las pistas de los Pinares de San Antón, una de las tradicionales en la capital sobre tierra batida, en 2016.

Durante este tiempo, Rune también ha jugado en Marbella, en Puente Romano, en el ATP Challenger y en el ATP 250 que hubo en 2021 con invitación por su proyección como número uno del mundo junior y campeón de Roland Garros de su categoría. Allí ya exhibió su buen tenis, que ahora, con su progresión, le hace ser uno de los jugadores de moda. El joven tenista nórdico, de 22 años, se ha visto envuelto en una insólita polémica después de que la rusa Anna Kalinskaya, actual número 32 del ranking WTA, le señalase como un incorregible ligón. "Antes me pasaba con más frecuencia. Ahora que soy mayor... no sé. Para algunos no hay posibilidad, no hace falta escribir. Alguien me escribió como 10 veces y luego se rindió. Lo voy a decir... Holger Rune. Se lo merece". Su compatriota Veronika Kudermetova explicó que contestó a Rune que era "demasiado mayor para él y que, si mirara mi Instagram, se daría cuenta de que estoy casada. Me respondió diciendo que lo sentía y desde ese momento ni me saluda cuando nos cruzamos por los torneos", añadió.

Kalinskaya afirmó durante su entrevista que el danés, que en teoría mantiene una relación con la modelo y empresaria italiana Carolina Donzella, "le escribe a todo el mundo. Piensa demasiado en sí mismo. O quizá simplemente esté desesperado, pero no es el único así", opinó.

"Puede que tengamos diferencias culturales que hagan que Anna interprete un comentario en una historia de Instagram como una invitación a una cita. Si quiero tener una cita la invito. No te preocupes", zanjó el danés, ahora centrado en ganar a España.