Francia no sale de su asombro: el humilde equipo de fútbol del Vannes, de la segunda división, se clasificó para la final de la Copa de Francia y será la segunda vez en la historia que un club de la categoría de plata logra llegar tan alto en la competición.

Vannes es una pequeña población de 50.000 habitantes situada al oeste de Francia, en la región de Bretaña. El desconocido Vannes dio el miércoles la sorpresa al derrotar en la semifinal al Niza. El tiempo reglamentario acabó con empate a uno y se pasó a la tanda de penales, donde el Vannes se impuso por 4-3.

"Enorme" tituló ayer el diario francés Ouest-France, secundado por el deportivo L'Equipe, que habla de una "colosal heroicidad".

El 25 de abril les espera la gran final en el Stade de France de París ante el poderoso Girondins de Burdeos, ganador de cinco ligas y de tres Copa de Francia, que a su vez eliminó al París Saint Germain por 3-0.

El entrenador del Vannes, Stephane le Mignan, no pudo contener la alegría tras el pitido final: "¿En el Stade de France? Esto es histórico". Dirigentes, jugadores, aficionados y amigos bailaron y bebieron en los vestuarios. Al micrófono se puso Kemal Bourhani, el hombre que dio la victoria al transformar el último penalti: "Éste es un grandísimo momento, somos héroes". Después, el capitán, Patrick Leugueun, gritó: "Esto es mágico".

El modesto Vannes alcanzó el éxito en la Copa sólo una temporada después de haber ascendido desde la tercera división. Sólo son profesionales desde el pasado verano. "Son como los ETS (el extraterrestre) en el planeta de los profesionales, pero de ahora en adelante son extraterrestres conocidos en toda Francia", escribió Ouest-France.

L'Equipe describió al Vannes como "el pequeño entre los pequeños", aunque no se puede hablar de suerte. Previamente, el Vannes dejó en el camino a equipos de la primera división como Valenciennes y Auxerre. Actualmente son séptimos en la segunda división.

"¿Dónde finaliza la loca aventura del Vannes?", se preguntó el portal de internet Sport24. "Vamos a París a ganar", dijo el veterano jugador Nicolas Savinaud. Michel Jeustin, carnicero y presidente del club, mantiene los pies en la tierra. "Mejor conseguir puntos para mantenernos en la segunda división", dijo mientras sujetaba una copa de champagne.