Málaga y la España futbolística siguen asimilando la primera inversión de un árabe en nuestra Liga. El proyecto de Al Thani promete un equipo grande a largo plazo. Y, tras los primeros pasos e inversiones, parece que, efectivamente, el jeque qatarí no viene de vacaciones a la Avenida de Martiricos. Casi 17 millones de euros gastados en el primer verano de fichajes, así como otra ración importante de dinero en obras caseras en La Rosaleda y el estadio de atletismo, la otra nueva casa blanquiazul, dan fe de ello. Pero hay quien se pregunta cuánto tiempo será así, o si sus ideas tienen temprana fecha de caducidad. Según un dato que ha podido saber este periódico, el asentamiento de los nuevos dueños no va en broma, puesto que sus asesores estuvieron estudiando el aterrizaje en la Costa del Sol durante año y medio.

A través de caras e internacionales consultoras, contactos con distintos empresarios y hasta comitivas que se fueron desplazando a suelo malagueño durante todo ese tiempo, Al Thani fue descubriendo las posibilidades de inversión y desarrollo empresarial que podía tener el asentamiento en la Costa del Sol. La aparición de la posibilidad de comprar el Málaga CF fue el último gran empujón para esa opción de expansión.

Y es que tanto el propio empresario qatarí como el grupo NAS, empresa que vertebra todo el conglomerado de empresas de Al Thani y cuya máxima figura es Abdullah Ghubn, vicepresidente del Málaga, ya mantenían un contacto con la España diplomática y empresarial. De hecho, según fuentes cercanas al jeque, en varias ocasiones el actual dueño del conjunto blanquiazul se vio obligado a rechazar invitaciones para pisar territorio español por motivos profesionales.

De ahí que no sorprendieran algunos de los actos y afirmaciones de Abdullah Al Thani posteriormente a la compra del Málaga. Tras presentar formalmente el proyecto blanquiazul en La Rosaleda, el jeque, instalado por esos días en Marbella, se reunió con la alcaldesa de dicha localidad, Ángeles Muñoz, para formalizar relaciones y anunciarle su idea de hacer "una importante inversión", que parece ser la idea de ampliar el puerto deportivo de La Bajadilla para asemejarlo más a Puerto Banús. Luego continuaría la ronda de reuniones personales con el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, y el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, al cual esbozó planes de proyectos futuros. Incluso, según apuntó hace dos semanas El Confidencial, el propio Al Thani se reunió en Marbella con le lehendakari vasco, Patxi López, para hablar de negocios.

A todo ello aludía el presidente del Málaga cuando explicó en el diario Al Sharq, uno de sus altavoces oficiales, que había rechazado la opción de comprar el Liverpool y que le encantaba la opción blanquiazul "por su capacidad de crecimiento". Hacer compatible las posibilidades empresariales de la Costa del Sol con un proyecto serio en el Málaga CF es el doble reto de Abdullah Al Thani y el grupo NAS. La dedicación temporal en la ciudad de Abdullah Ghubn, que en principio iba a estar menos tiempo del que lleva, lo corrobora. Ir viendo los frutos a lo largo de las próximas temporadas es algo que sólo podrá demostrar el tiempo.