El jeque viene con intenciones

"Ha llegado el momento del cambio. Muy pronto en Málaga", fue el mensaje con el que el jeque Al-Thani removía unas ya de por sí turbias aguas del malaguismo. Fue el pasado martes, justo después del evitable cruce de comunicados protagonizado por Sergi Darder y el club. Con este anuncio el presidente y propietario del Málaga abría un reguero de incógnitas. ¿A qué se refiere exactamente con el momento del cambio? ¿Qué quiere cambiar? ¿Cambiará algo o se limitará a dejarse ver, como en ocasiones anteriores? Fuentes cercanas a la propiedad consultadas por este periódico señalan que Al-Thani llega para de verdad ejecutar una serie de decisiones que tiene meditadas desde hace semanas. Las intenciones del jeque, en esta ocasión, parecen serias.

Según estas mismas fuentes, Al-Thani no está demasiado contento con el desarrollo del club en los últimos tiempos. El jeque se ha preocupado de informarse del día a día y ha sondeado a personas que están al tanto de la actualidad de la entidad más allá de los dirigentes y su propio hijo Nasser, vicepresidente ejecutivo desde el verano. Al-Thani no aprueba algunos de los acontecimientos recientes y su intención, según revelan estas fuentes, es efectuar cambios a corto y medio plazo.

Los actuales gestores, mientras tanto, aguardan. En el club se desconocen cuáles son las intenciones del presidente a pesar del anuncio realizado a través de las redes sociales, su canal favorito para comunicarse. Igualmente, no se sabe cuándo llegará a la ciudad, aunque en la entidad ya prevén que su aterrizaje sea en breve. Ya en julio dejó caer que volvería a la ciudad aunque aquel anuncio quedó en un brindis a sol.

Al-Thani tiene tareas pendientes para con el club desde que rechazó la venta a los inversores chinos y puso a su hijo Nasser al frente como sustituto de Moayad Shatat. Uno de los asuntos que se comunicaron que se emprenderían era la celebración de una conferencia de prensa con su hijo Nasser acerca del nuevo rumbo desde la salida de Shatat de la entidad. También queda pendiente ese "proyecto de futuro y estabilidad" que se anunció con la llegada del joven dirigente y antes de la venta de los Samus, Juanmi y Darder durante el mercado de fichajes estival.

Impulsar la construcción de la Ciudad Deportiva es otra tarea que debe cristalizar. Tampoco se conoce su opinión acerca de la hotelera Blue Bay y el contencioso judicial abierto por el cual le han bloqueado sus acciones hasta la celebración de un juicio el próximo año. La empresa Blue Bay, que patrocinó al Málaga hace dos años, reclama ser dueña del 49% de las acciones.

La pasada campaña el jeque Al-Thani presidió desde el palco dos encuentros en La Rosaleda, contra el Levante y el Barcelona. Ambos se celebraron en septiembre de 2014 con resultado de empate a cero.