"Ser primero es una ilusión, no un objetivo"

El pívot del Unicaja dice que "veo que se hacen las cosas con más sentido ahora en el club"

Germán Gabriel, en La Dehesa.
Germán Gabriel, en La Dehesa.
J. M. O. Málaga

25 de marzo 2015 - 05:02

Germán Gabriel lleva dos meses en Málaga desde su regreso. Integrado desde el primer día por muchos motivos, tiene su peso en la rotación de Joan Plaza y ayer pasó por la tertulia de baloncesto de la Cadena Ser en el Restaurante La Dehesa, con presencia de Málaga Hoy. El pívot malagueño hizo un repaso a sus últimas temporadas, a los problemas de cobro que padeció en Bilbao y antes en Estudiantes y a su situación actual. "Volví tres veces a Málaga y volvería más. No me creía que el líder de la ACB y, además, el equipo de mi ciudad se acordara de mí. Hubo un interés de Sevilla, pero no dejé ni que hubiera oferta. Dos horas después de firmar mi rescisión con Bilbao ya había firmado con el Unicaja", decía Germán, padre de una niña y en su madurez como jugador. "Me he encontrado un vestuario sin estrellas, en el que cada uno tiene su rol claro. Yo no vine a sustituir a Caleb Green, sino a complementar el juego interior. Fue lo que se me dijo y así está siendo. Me alegro de que Caleb esté jugando muy bien, a veces un jugador americano teme que le corten y al ver que no vine para eso ha tenido más tranquilidad".

Germán se ve con fuerzas para seguir "varios años más jugando. Ojalá que aquí, por mí claro que seguiría. Pero también influye la situación. Muchos no valoran cómo funciona el Unicaja. Si viviera otra situación parecida a la de Bilbao, con los impagos y los problemas, creo que las ganas se me irían. Pero ahora me veo muy bien", opinaba el canterano de Los Guindos, que ve que en el club "se ha vuelto un poco a los orígenes, se hacen las cosas con más sentido, no con tanta estrella y sí como un bloque. No se gasta tanto, también por la situación general. Y se están teniendo grandes resultados ¿Ser primeros? Es una ilusión, no un objetivo. Por experiencia sé que los objetivos que no se cumplen son piedras en la espalda", remachó Germán.

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