El traspaso de Sergi Darder al Olympique de Lyon se acerca a su punto culminante, sea para bien o para mal. El balear ha estado en los tres últimos mercados en la lanzadera de salida alguna vez, pero nunca se ha concretado. Y estuvo muy cerca de ir a Oporto en agosto de 2014. Ahora emerge la perspectiva del equipo lyonés, que jugará la próxima Liga de Campeones y que busca refuerzos tras algún resultado hiriente (6-0 ante el Arsenal) y perder la Supercopa ante el PSG (2-0). Como se publicó ayer, Darder y el OL tienen perfilado un acuerdo que queda a expensas de que Málaga y el club rodanés acuerden la fórmula de pago y los bonus, por una cantidad nunca superior a los 10 millones.

La situación ha devenido en que a Darder le seduce una salida, han pasado varios trenes y vuelve a presentarse uno apetitoso. Aunque Vicente Casado ha recalcado que no era necesario vender tras las salidas de los Samus y Juanmi, la historia reciente recuerda que ese mensaje se ha mandado anteriormente y posteriormente se han producido ventas sin tiempo para que haya cambiado diametralmente la situación. Eso sí, hay una posición con relativa más fuerza a favor del Málaga, que, no obstante, no detenta el pase completo del centrocampista balear. En su momento se vendió algo más de un tercio a un fondo de inversión para conseguir liquidez.

El Málaga considera que la posición está bien cubierta con Camacho, del que se espera que pueda estar para el inicio de la competición oficial, Recio y Tissone más las aportaciones que pueden realizar Juanpi Añor, Espinho y Pablo Fornals. Este último es el canterano más empleado por Javi Gracia en la pretemporada. Ha jugado en los tres partidos en Sudamérica, siempre como suplente aunque con media hora de juego en Argentina y Uruguay. Se le renovó en el pasado ejercicio porque se piensa en él como un jugador del primer equipo a no mucho tardar. Es el planteamiento inicial de la parte noble malaguista, a la que no le pillaría desprevenida esa salida en el centro del campo: no fichar a nadie. Otro cantar es lo que pueda apretar Javi Gracia si considera que se queda cojo, pero el Málaga piensa que puede perfectamente tirar con lo que hay en plantilla y que hay hueco para que jóvenes interesantes promocionen.

En otra perspectiva, la posibilidad de traer a un jugador cedido desde el Villarreal, como se acordó en el traspaso de los Samus, se abriría. El preferido es el extremo argentino Cristian Espinoza, cuyo desembarco desde el Huracán hasta Castellón no se acaba de producir. Los dirigentes malaguistas coincidieron en Buenos Aires con el jugador, que ayer salía como titular en el partido que medía al Huracán con el Crucero. Momentos claves.