La salida de Espinho, cuestión de horas

La primera salida en este mercado de invierno para el Málaga está a punto de producirse. Fabio Espinho, defenestrado desde el inicio de la temporada para Gracia, no entrenó ayer con el resto de la plantilla y ultima los detalles de su salida del club.

Su destino, según adelantó El Desmarque Málaga, será el Moreirense de la primera división portuguesa. El ostracismo del centrocampista portugués le motivó a concluir su periplo en el club blanquiazul, circunstancia por la que ayer el Málaga le dio permiso para ausentarse de la sesión y terminar de apuntalar los términos de su nuevo contrato.

La oficialidad del traspaso es cuestión de horas. Espinho pasará a ser historia en la plantilla de un Javi Gracia que nunca ha confiado en sus cualidades. El luso, que vino para suplir la baja de Sergi Darder, no convenció desde el primer momento al técnico navarro, que jamás lo vio como una opción para el doble pivote. Tanto es así que, a pesar de la lesión de Camacho, Gracia prefirió colocar a Tissone o incluso Filipenko en esa posición.

Además, la marcha del ex del Ludogorets ayuda al Málaga a la hora de poder reforzarse en lo que resta de mercado ya que, actualmente, los blanquiazules deben liberar margen salarial para acometer alguna incorporación.

La ausencia de Espinho fue la noticia más significativa de la sesión de entrenamiento de ayer, que tuvo la presencia de los jugadores del filial Iván Rodríguez y Alberto López. Que estuvieran presentes ambos laterales no es casualidad, ya que Miguel Torres continúa al margen del grupo y está prácticamente descartado para el derbi en el Pizjuán. Tampoco estuvo, lógicamente, Juankar; el cual todavía no ha iniciado su fase de recuperación.