La humillación a la que el Orleans sometió al Unicaja no tiene demasiados precedentes en competición continental en Málaga. En concreto, sólo un partido de Euroliga se perdió en casa (tanto en la primera participación en Ciudad Jardín como en las posteriores en el Martín Carpena) por una diferencia superior a la que cayó el Unicaja ante el modesto equipo francés: 16 puntos (72-88).

En concreto, fue en el primer partido del Top 16 de la campaña 2002/03. Era la primera vez que el equipo malagueño llegaba a esta instancia de la competición y el CSKA de Moscú le endosó un severo correctivo al cuadro entonces entrenado por Bozidar Maljkovic (76-95). J. R. Holden y Victor Alexander, que la temporada siguiente tuviera un paso fugaz por Málaga, fueron los ejecutores moscovitas.

Tras aquella derrota, la siguiente en amplitud fue una endosada por el Maccabi en la temporada 2006/07, la última antes de una secuencia de casi 30 duelos que tuvo al Carpena infranqueable durante más de dos años en Europa. Fue en la etapa de Scariolo, el año de la Final Four. El equipo macabeo venció por 16 puntos también, como el jueves el Orleans (67-83). Chirría el nombre del equipo francés al lado de multicampeones continentales.

Y es que el Unicaja ha mejorado sus actuaciones en Europa y fortificado sus aspiraciones en una notable efectividad en los partidos de casa. De 84 encuentros de Euroliga en casa el Unicaja se ha impuesto en 60, lo que da un porcentaje de victorias del 71.4%, cifra que ha subido en las últimas temporadas y que la amplia derrota ante el Orleans, en una segunda mitad nefasta, no hace justicia.