El Unicaja cambia el chip. Tras 15 años en la Euroliga da un paso atrás para jugar en la Eurocup. Para ellos ha cambiado el sistema de abonados, con objeto de reclutar a aficionados para los partidos entre semana. Martes y miércoles serán los días de juego en una competición de la que ya se conocen los 24 equipos contendientes. El sorteo se celebrará el próximo jueves 7 de julio en Barcelona.

Como se ya se informó, el sistema será de cuatro grupos de seis equipos en la primera fase, desde octubre a diciembre, que comprenderá 10 partidos. Después vendrá un Top 16 que comenzará en enero, con otros cuatro grupos de cuatro equipos. Se solventará en enero y febrero, en seis partidos de mucha intensidad. Después, desde cuartos de final hasta la final, eliminatorias al mejor de tres encuentros. El campeón tendrá plaza directa en la siguiente Euroliga (2017/18).

El listado de la Eurocup presenta un conglomerado de muchos equipos de calidad. Hasta 17 han participado alguna vez en la Euroliga. Se premia a las ligas fieles, puesto que no hay equipos turcos (sí hay cuatro en la Euroliga, el resto opta por la FIBA) y franceses. Y habrá hasta cinco equipos de ACB, la liga más representada. Los cuatro que se metieron por méritos propios (Valencia, Herbalife, Unicaja y UCAM) más una wild card para el Bilbao Básket. Además, hay cuatro clubes rusos, lo que potencia la calidad de la competición y tuerce el brazo de la FIBA y la Federación de Rusia, que pretendía que fueran a la Champions League de la organización supranacional. Khimki, Lokomotiv Kuban, Nihzny y Zenit, equipo de Ryan Toolson, conforman la poderosa armada rusa. Italia, con cuatro equipos, también gana poder. Se le da una wild card al Cantú para complementar a Reggio Emilia, Sassari y Trento. Se premia también a los equipos balcánicos, de la ABA League, con bloques de Croacia (Cedevita), Serbia (Partizan), Eslovenia (el histórico Olimpija) y Montenegro (Buducnost). Alemania, con Bayern, Alba Berlín y Ulm, finalista de la Bundesliga, también tiene presencia poderorsa. Equipos pujantes económicamente como el AEK de Atenas (con Kostas Vasileiadis) o el Hapoel Jerusalén israelí (ficharon a Pianigiani como técnico) conforman un menú suculento e interesante. De menor nivel que la Euroliga, pero más alto que la antigua Eurocup.