Un túnel de mes y medio

Alfonso Sánchez cuenta por semanas. "Así se me hace más corto", argumenta. Cuando acabe ésta le quedarán seis, apenas mes y medio, para regresar a las canchas. Su rodilla derecha, cuyo ligamento cruzado y menisco se quebró el 17 de octubre a los pocos segundos de iniciarse el partido ante el Polaris World Murcia, ya le responde casi a la perfección. Es frecuente verle correteando con notable intensidad antes de los partidos en el Carpena. En los entrenamientos se atreve a realizar incluso algunos mates, siempre con las aconsejadas precauciones. Incluso Scariolo bromea con él amagando con convocarle de verdad para el próximo partido. Pero el tope lo marca el traumatólogo que le operó, José Nogales. Seis meses después de la lesión para volver a jugar. Es inamovible y no se puede arriesgar.

La previsión es que Alfonso se incorpore en un par de semanas a los entrenamientos con el equipo de Liga EBA. A la siguiente, con el Clínicas Rincón Axarquía. Y, después, ya con el primer equipo. En estas nos plantamos a mediados de abril, una fecha avanzada de la temporada, apenas a unas semanas del inicio del play off. La situación deportiva y médica del primer equipo determinará cuál será su función. A un mes y medio vista, hacer cábalas ante la plaga de lesiones que recae sobre la plantilla resulta aventurado. El marbellí tiene ficha con el equipo de LEB Plata, el Clínicas Rincón, con el que podría jugar, por cierto, el play off de ascenso a LEB Oro que los discípulos de Paco Aurioles tienen casi asegurado. Pero lo más importante es que Alfonso Sánchez ya ve la luz al final del túnel. Faltan mes y medio. O seis semanas.