Andalucía tuvo una evolución económica en 2021 mejor que la del conjunto de España y este año crecerá lo suficiente como para alcanzar o quedarse muy cerca de recuperar toda la actividad económica perdida por efecto de la pandemia de Covid-19. Ésas son las dos principales conclusiones del informe Economía Andaluza. Cuarto Trimestre 2021, presentado este lunes por el Observatorio Económico de Andalucía (OEA).

 El panel de economistas del OEA “prevé un aumento del PIB regional del 5,5% para 2022, muy cerca de alcanzar los niveles de recuperación de la actividad previos a la pandemia”, explicó su presidente, Francisco Ferraro, para rematar una presentación en la que situó como principales factores que impulsarán el crecimiento en el presente año “el consumo de los no residentes, la demanda exterior y, sobre todo, la inversión”, pues sustentarán una aceleración “de la demanda que impulsen el crecimiento”, sobre todo, a partir de la la segunda mitad del año, “cuando sean visibles los efectos de la ejecución del Programa de Recuperación Next Generation EU”.

Las previsiones del OEA, según detalló Ferraro, es que en el primer trimestre de 2022 el efecto de la variante ómicron del Covid-19 “amortigüe” el crecimiento de la actividad. Es más, Ferraro señala que la comparación intertrimestral respecto al cuatro trimestre muestre un crecimiento reducido,  pero, también que la comparación interanual entre enero y marzo, teniendo en cuenta la debilidad que la economía andaluza mostró en el mismo trimestre del año anterior, mantendrá el tono expansivo en tasa interanual, “aunque moderando su ritmo de crecimiento, en línea con el retroceso del consumo de los hogares, contenido por la incertidumbre y la elevada inflación”.

 A partir de desaparición de los efectos negativos provocados por la última oleada de contagios, Andalucía recuperará, según Ferraro, una dinámica de crecimiento más expansiva a partir del segundo trimestre.

 “Aceptando que los riesgos a la baja no se materialicen, y en un escenario de menor incertidumbre sanitaria, los hogares tendrán una nueva oportunidad para incorporar al consumo y la inversión una parte del ahorro embalsado durante la pandemia”, dijo el presidente del OEA. 

Porque, además, la eliminación gradual de las restricciones a la movilidad en las economías de nuestro entorno impulsará la recuperación del turismo y un aumento de los intercambios comerciales hacia el exterior.

La inversión jugará ese tercer factor, aunque el presidente del OEA reconoció que a los expertos de su panel les resulta imposible valorar cómo está siendo la gestión de los fondos europeos para la recuperación en Andalucía. “Exige un nivel de oscuridad muy grande”, afirmó Ferraro respecto a la nula información sobre los Next Generation en Andalucá. “No sabemos cíñales son los proyectos y por tanto no podemos pronunciarnos ni hacer una valoración”, recalcó a preguntas de este periódico.

Algo de convergencia

Ferraro sí reconoció que tanto en la fase de contracción como en el inicio de la recuperación, Andalucía ha evolucionado mejor que en España. Por un lado, resaltó que la contabilidad regional del INE señala que mientras el conjunto del país redujo su PIB un 10,8% en 2020, Andalucía lo hizo ocho décimas menos, el 10%. Y, en segundo lugar, las previsiones que hace OEA, la evolución de Andalucía en el crecimiento ha sido mejor que la de España en su conjunto.

 “Hemos convergido algo”, concluyó Ferraro, que explicó que se ha debido a las características de la crisis y a la estructura económica de Andalucía. Señaló en concreto el mayor peso de la agricultura, que es un sector que ha sobrellevado mejor la crisis, o que el turismo nacional tuvo un mejor comportamiento que en otras comunidades autónomas que dependen más de la llegada de los extranjeros. Un tercer factor es que un sector muy castigado como el automovilístico tiene menor peso en Andalucía que en otros terriotorios de España.

Previamente, el economista del OEA Ernesto Mesa había relatado que la estimación realizada por el Indicador Sintético de Actividad de Andalucía del Observatorio Económico de Andalucía (IOEA), la economía andaluza experimentó un crecimiento intertrimestral del Producto Interior Bruto (PIB) del 2,2% en el cuarto trimestre de 2021, dos décimas más que la estimación del INE para el PIB español.

Mesa añadió que, con esta tasa, el crecimiento interanual del IOEA para el cuarto trimestre de 2021 es del 5,4%, lo que supera también en dos décimas al estimado por el INE para España, por lo que el crecimiento medio resultante para la economía andaluza en 2021 sería del 5,3%, tres décimas más que el estimado por el INE para el PIB de España.

“Con esta estimación, y teniendo en consideración el crecimiento de la economía andaluza en 2020 según la Contabilidad Regional del INE, la economía andaluza tendría que crecer al 5,5% en 2022 para recuperar los niveles previos a la pandemia”, añadió Mesa antes de que Ferraro señalase precisamente que, según el OEA, se alcanzará ese crecimiento este año.