Y Paco se convirtió en Juanma. Once meses después de que el presidente de la Junta pintase de azul todo el mapa de la capital –iniciando su campaña diciendo que quería ser el Paco de la Torre de Andalucía–, el candidato popular ha salido reelegido por sexta vez con un resultado similar. No por nada uno de cada dos malagueños (49%) que depositaron su voto en las urnas lo hicieron con una papeleta encabezada por Francisco de la Torre. 

El puño de hierro del PP se ha extendido por los 11 distritos, desde los típicamente populares como pueden ser el Este, Centro o Teatinos; hasta los bastiones clásicos de los socialistas, como Carretera de Cádiz o el Oeste. Da igual si la renta es mayor o menor, si el precio del alquiler es más o menos alto. Ni el Bosque Urbano, la torre del puerto, el Plan Litoral o cualquiera de los proyectos que han podido tener contestación desde la opinión pública ha supuesto un escollo para que los populares se impusieran. No ha habido discusión posible. 

Tanto es así, que en el distrito Este, donde, por ejemplo, el proyecto de remodelación de los paseos marítimos levantó suspicacias en la asociación de vecinos, donde afirman que no se ha consensuado con ellos, o donde una mañana el barrio de Miraflores se llenó de carteles que rezaban "Paco nos da la espalda" en precampaña, ha sacado cuatro votos por cada uno de los obtenido por su siguiente competidor, el PSOE. 21.000 sufragios populares por 5.000 socialistas. 

En el Centro, donde la asociación de vecinos del Centro histórico y la del Soho están en pie de guerra contra el ruido y el incivismo el resultado es similar: 1.184 apoyos para lista que encabeza De la Torre, 328 para Dani Pérez. Ni siquiera que haya más pisos turísticos que vecinos censados pasó factura a la gestión popular. 

Lejos del Centro, donde podía haber calado el mensaje socialista de "quiero mi barrio como calle Larios" que hurgaba en la falta de limpieza de algunas zonas de Málaga, tampoco se apoyó a las opciones que buscaban un cambio en la ciudad. En Carretera de Cádiz, el barrio por antonomasia del socialismo en Málaga, el PP le sacó 3.000 votos a la candidatura liderada por Dani Pérez; 16.000 apoyos por 13.000. 

En Churriana obtuvieron 14 puntos porcentuales más de sufragios, en Ciudad Jardín la diferencia fue casi idéntica; en Málaga Norte les sacaron 13 puntos, en el Oeste, 17; en Campanillas, 19; en la Victoria 13 puntos y en La Merced 9. Hasta 23 puntos porcentuales de apoyo más tuvieron en el entorno de Carretería y Álamos, pese a las largas obras de remodelación de las vías para semipeatonalizarlas. Una victoria incontestable.

Y ahora, en dos meses, Feijóo querrá ser Paco, o Juanma; lo mismo da. Porque Málaga Capital lleva dos comicios seguidos apoyando a los populares sin ningún tipo de duda. Es cierto que la dupla Paco-Juanma parece estar tan de moda como la ciudad. Feijóo querrá incluirse en este binomio el próximo 23 de julio. Ya lo apuntó en el mitín con el que cerró la precampaña en Málaga. Queda por comprobar si ha aprendido algo y se suma a la ola o, por el contrario, baja la espuma de la euforia.