El presidente del Congreso, José Bono, aseguró ayer que el obispo de San Sebastián, monseñor José Ignacio Munilla, es un hombre "extremadamente conservador, muy contrario a cualquier planteamiento progresista", por lo que dice saber de sus compañeros del seminario de Toledo donde se formó como sacerdote.

Bono añadió, en una entrevista en Telemadrid, que "a pesar de que sea vasco y que no sea nacionalista", es un hombre "muy de derechas", aunque advirtió que "esto no es una valoración negativa y mucho menos una valoración moral negativa".

El presidente del Congreso señaló que desde posiciones ideológicas "que todos identifican", dicen ahora "que los que querían un obispo vasco ya lo tienen". En este sentido, matizó que "es cierto que Munilla es vasco y habla euskera", no como el obispo de Bilbao, monseñor Ricardo Blázquez, que fue recibido por el entonces presidente del PNV, Xabier Arzalluz, como un desconocido: "Un tal Blázquez", recordó. Sin embargo, Bono concluyó que "eso no significa que tenga que ser ideológicamente coincidente con las tesis que han propugnado obispos vascos".

Munilla afirmó ayer que no se siente atacado y enmarcó en la normalidad el cese automático de los vicarios cuando se jubila su obispo, como es el caso de monseñor Juan María Uriarte, su antecesor.