España y Marruecos celebraron este viernes en Madrid su XI cumbre bilateral. En un momento marcado por la crisis migratoria en el mar Mediterráneo y por la amenaza del terrorismo yihadista, los jefes de gobierno de ambos países ratificaron la cooperación y evitaron entrar en temas polémicos. "Las relaciones bilaterales pasan por un momento excelente que favorece la confianza mutua y permiten responder a los retos comunes", dijo el español Mariano Rajoy en una rueda de prensa ofrecida conjuntamente con su homólogo marroquí, Abdelilah Benkiran.

"No hay marcha atrás entre España y Marruecos, hemos abierto un camino de cara al futuro para estas relaciones. Para demostrar que el Mediterráneo no debe ser un motivo de separación sino que debe ser un motivo de acuerdo, colaboración e intercambio comercial", expresó el primer ministro de Marruecos. Ambos mandatarios analizaron a lo largo de la jornada la situación política y económica de sus respectivos países así como los retos a los que se enfrentan, principalmente la lucha contra el terrorismo yihadista, una "prioridad compartida", la lucha contra el narcotráfico y contra la inmigración ilegal.

No abordaron, sin embargo, temas espinosos en las relaciones bilaterales, como los problemas en la frontera hispano-marroquí, que cientos de inmigrantes subsaharianos trataron de atravesar ilegamente en los últimos meses, o la decisión del juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz de procesar a once funcionarios de Marruecos por cargos de genocidio en el Sáhara Occidental. "Cuando estamos construyendo unas relaciones basadas en la confianza, empezamos por lo bueno, de otros asuntos ya hablaremos más adelante", aclaró Benkiran.

Sí hablaron, y mucho, de las relaciones económicas entre ambos países y de las posibilidades de inversión. "Marruecos es nuestro principal cliente fuera de la Unión Europea tras Estados Unidos, y España es el principal socio comercial de Marruecos", destacó Rajoy. "Hemos hecho un llamamiento a nuestros hermanos españoles para aumentar sus inversiones en Marruecos en todos los campos", anunció Benkiran. El primer ministro marroquí viajó a Madrid acompañado por sus ministros de Exteriores, Justicia, Interior, Fomento, Sanidad y Asuntos Sociales e Industria, Energía y Turismo, que celebraron reuniones sectoriales con sus homólogos españoles. Durante la jornada se firmaron varios acuerdos de cooperación en distintas materias como justicia, transporte, turismo o desarrollo social, y se celebró un encuentro paralelo de empresarios de ambos países.

La visita de Benkiran a España arrancó a primera hora de la mañana con un encuentro con el rey Felipe VI en el Palacio de la Zarzuela. Después fue recibido con honores por Rajoy en el palacio de La Moncloa. Es la segunda reunión de alto nivel celebrada entre España y Marruecos desde que Rajoy se puso al frente del gobierno español, en diciembre de 2011. La primera tuvo lugar en Rabat en octubre de 2012.