Territorio comanche

Llegó en un autobús con los colores del PSOE y el lema de campaña a la plaza de España, donde le estaban esperando los miembros de la candidatura gaditana socialista a la Alcaldía de Cádiz. José Antonio Griñán, presidente de la Junta, sabe que viene a un terreno minado, a un territorio comanche, donde el pizarrismo al que ha desterrado del Gobierno de la Junta y de muchos de los cargos principales de la provincia sigue teniendo mucha fuerza. De hecho, una de las caras de este grupo en Cádiz es el secretario local, Federico Pérez Peralta, y número 2 de la candidatura. Ayer este último le dio un abrazo al presidente nada más bajarse del autobús, pero la muestra de afecto fue sólo en una dirección.

Griñán hace ya casi dos años habló de aquel famoso término de Cádiz Herzegovina, refiriéndose a los problemas internos que afloraban de vez en cuando, sin saber muy bien que aquí es donde se iba a organizar la mayor resistencia a los cambios que impulsó en la organización el partido. Es casi como esa aldea gala de Asterix que resiste a la invasión romana.

El presidente autonómico, que el año pasado se deshizo en elogios hacia Marta Meléndez en la presentación de esta como candidata a la Alcaldía, en el discurso que dio ayer en el patio de la Cámara de Comercio no hubo un solo guiño hacia la persona que va a enfrentarse a Teófila Martínez. La única referencia que hizo es que pese a que alguien le diga que éstas no son unas elecciones municipales, aquí se van a elegir concejales: "los comicios no son primarias de nada".

Griñán estuvo más preocupado de vender la inversión de 649.000 euros en el edificio anexo del Oratorio. Eso sí, no se le olvidó comentar que la resolución había sido firmada por Francisco Menacho, actual consejero de Gobernación y presidente del Consorcio del Bicentenario, gaditano que ha sustituido al venerado Pizarro.

Ahora bien, no todos los socialistas que estaban allí eran pizarristas, porque en el socialismo gaditano también hay diferentes opiniones.

El objetivo de ayer era la reunión con los empresarios para hablar de creación de empleo y valorar también las propuestas que ponen los socialistas encima de la mesa para disminuir las tasas de paro.

Griñán, como vienen manteniendo en su discurso los socialistas, habló de que la crisis es internacional "y cuando hablamos de lo local hay una serie de problemas que no nos corresponde solucionar, pero no por ello debemos de dejar hacer lo que nos corresponde".

El presidente de la Junta está convencido de que hacen falta medidas que cambien el tejido productivo, algo que se tiene que hacer de común acuerdo con empresarios y sindicatos, enmarcadas en el VII acuerdo de concertación social, y que también forman parte de la economía del conocimiento y la igualdad: "Una economía que se proyecte en la investigación, en la innovación y en el conocimiento", según el secretario general del PSOE en Andalucía, quien también ha considerado fundamental la implicación de la universidad con el mundo de la empresa.

También habló del apoyo de la Junta al corredor ferroviario central que conecta Algeciras con el sistema logístico y de transporte de Europa.

Dudó de que el PP vaya a hacer una campaña limpia si se mira la historia, calificó como "bastante buenos" los datos sobre intención de voto que ha dado el CIS sobre las elecciones municipales y hasta de Bildu y su respeto por la decisión que ha tomado el Tribunal Constitucional: "no sería bueno que un poder censurara a otro poder".

Antes que todo eso, imagen de unidad y normalidad y paseo por la plaza de España donde Griñán coincidió con un grupo de escolares con los que conversó amistosamente. Allí, junto al monumento de Las Cortes, se le hizo un aluvión de fotografías que después, una vez que anunció la partida extra presupuestaria para el Doce, cargaba de simbolismo la presencia de Griñán en ese lugar.

El presidente, tras la reunión con los empresarios, volvió a montarse en el autobús y salió camino de Algeciras y la Línea, donde iba a mantener nuevas reuniones.