La serie Paraíso, que este viernes comienza su emisión en Movistar+, rueda ya una segunda temporada, que su director y creador, Fernando González Molina, no sabe si será mejor que la primera, "pero sí mucho más complicada", anunció el director de producción original de la plataforma, Domingo Corral. La serie se presentó este viernes en el Festival de Málaga, con la asistencia de todo el equipo actoral de la serie, encabezado por Macarena García y Gorka Otxoa, además de Ruth García y David Oliva, coguionistas con el director de Paraíso y varios de sus productores.

García, que ya coincidió con González Molina en Palmeras en la niebla y Luna, el misterio de Calenda, interpreta a una guardia civil en 1992 "cuando no había casi mujeres en el cuerpo y los uniformes que llevaban eran de hombre, pero en la talla más pequeña", ha contado el director, mientras la actriz, premio Goya por Blancanieves (2012) precisó lo "libre" y "cuidada" que se ha sentido.

"Para mí ha sido una experiencia preciosa, ha sido muy emocionante reencontrarme con Fer (...), me he sentido muy bien rodeada de un montón de actores maravillosos, que encima para muchos era su primer proyecto y estaban llenos de pasión y emoción, y lo transmitían todo el rato. Nos dejaban a todos la sensación de que estábamos haciendo algo muy especial", dijo Macarena García. "Creo que la serie es especial, muy arriesgada consideró que juega con los riesgos que toma; es muy entretenida y estamos deseando ver lo que le parece al público".

La serie, ambientada en 1992, toma elementos propios del género fantástico

El director de Tres metros sobre el cielo, especialista en descubrir nuevos talentos (Mario Casas, María Valverde) mezcla en la serie un potente equipo de jóvenes desconocidos, Pau Gimeno, Cristian López, Jorge Leon Martinez, Héctor Gozalbo, María Romanillos y Patricia Iserte, con Macarena García, Gorka Otxoa e Iñaki Ardanaz. Según González Molina, este ha sido el rodaje "más complejo" de su carrera, con cuatro meses de parón por la covid, "sin seguro, preocupados; pero nos vino bien porque aprovechamos para mejorar", afirmó.

Paraíso ocurre en 1992 en el levante español; un año del que todo el mundo se acuerda, según González Molina; la Expo, los Juegos Olímpicos... pero también los crímenes de Alcasser. "Nosotros teníamos la edad de los chavales de la película en el 92, una época muy poco retratada, donde vivimos lo mejor y lo peor", apunta la guionista Ruth García, decidida a contar la historia "de primera mano". Paraíso, que toma la forma de serie fantástica, remite inevitablemente a Strangers Things y mezcla lo romántico, los primeros besos, la amistad inquebrantable, la importancia de la familia y la música de los 90, con el misterio, el crimen y lo desconocido de por medio.