La Canasta entra en Sevilla a lo grande

La firma malagueña de panadería, cafetería y repostería La Canasta entró ayer en Sevilla por la puerta grande. La empresa inauguró su primer establecimiento en la capital hispalense en la avenida Constitución, justo al lado de la Catedral, en un local de 800 metros cuadrados que es, según explican fuentes de la compañía, uno de los mayores de Andalucía en el sector hostelero, lo que implica, de hecho, que sea el mayor local de La Canasta.

La empresa, fundada en 1983, siempre ha trabajado en Málaga, donde se ha expandido de manera notable en los últimos años hasta alcanzar los 41 tiendas -la última será una nueva panadería en Teatinos-. La apertura en Sevilla es su primer salto fuera de la provincia malagueña y, por ahora, no prevén nuevos proyectos en otras provincias andaluzas. "No nos lo planteamos porque es difícil el sistema logístico, pero no podíamos dejar escapar una oportunidad como la que se ha presentado en Sevilla", explican fuentes de la cadena.

Esta iniciativa parte de un empresario que habló con los directivos de La Canasta para abrir un local franquiciado en Sevilla. Dadas las características del establecimiento se llegó a un acuerdo y, aunque es una franquicia, se ha realizado una inversión conjunta para llevarlo a cabo ya que, según explican, "el local es espectacular y va a ser una tienda icono". La Canasta solo posee dos negocios franquiciados -uno en Marbella y este en Sevilla-, siendo los demás propios. Los gestores de la firma malagueña exponen que el proceso no ha sido sencillo ya que han tenido que crear un sistema logístico específico para poder atender dos veces al día -por la mañana y al mediodía- al establecimiento en Sevilla. "En la tienda se fabricará el pan y los dulces, pero hay otra serie de productos que sí necesitamos abastecerlos desde nuestra central en Málaga, lo que va a ser una aventura importante", apuntan. En el establecimiento comercializarán algunos productos típicos sevillanos en fechas señaladas como Navidad o Semana Santa y el resto de productos que se distribuyen en Málaga de forma habitual. En el local se estima que trabajarán entre 30 y 35 personas cuando esté perfectamente rodado, un volumen similar al de otros establecimientos en la capital malagueña.

El local, en el que anteriormente estaba otro negocio de restauración llamado Horno de San Buenaventura, era uno de los más codiciados hasta el punto que La Canasta tuvo que competir con gigantes que también querían el inmueble como McDonald´s, Grupo VIPS o la multinacional de pollo frito KFC Corporation. El acuerdo entre La Canasta y la empresa granadina Acacio, propietaria del inmueble desde 2012, se firmó hace unos meses. Un estudio señala que el 90% de los visitantes de Sevilla pasan por esa avenida y, por tanto, por la puerta de este local que La Canasta quiere convertir en un referente.