El mayor museo de belenes
Mollina acoge desde ayer las instalaciones más grandes del mundo dedicadas a este arte, con 60 nacimientos y más de mil figuras
Algunas creaciones ocupan salas completas
Mollina acoge desde ayer el mayor museo de belenes del mundo, que abrió sus puertas tras completar el proceso de instalación de las diferentes composiciones que se muestran al público y que ofrecen una amplia gama de estilos y tamaños. En sus salas se puede encontrar desde un enorme belén circular que ocupa toda una sala hasta diminutos dioramas en los que se lleva a la mínima expresión el arte de construir un belén en el menor espacio posible y se dejar por ello ningún detalle sin introducir.
Ayer, la emoción era evidente entre los primeros visitantes que se acercaron hasta las instalaciones, como es el caso de Maracena, una belenista de Sevilla que asegura que había incluso tenido problemas para conciliar el sueño ante la apertura del museo. "Es emoción lo que siento, tengo hasta ganas de llorar", explicaba. Ella asegura que el trabajo y el mimo de las instalaciones y la calidad de las obras es "impresionante".
En el museo se pueden encontrar belenes de orígenes muy diferentes, estando representados gran cantidad de países, al tiempo que los belenistas españoles también han tenido un gran protagonismo, con especial mención a la escuela catalana, que tiene una larga tradición en este tipo de belenes y que utilizan una técnica especial para dar perspectiva a sus creaciones. Los amantes de este arte pondrán observar más de 60 nacimientos en los que existen unas 1.000 figuras, teniendo algunos de ellos unas grandes dimensiones, como el dedicado a Andalucía, que incluye diferentes zonas de la comunidad en un guiño muy especial hacia la comunidad que acoge en museo.
El proyecto ha sido posible a través de la Fundación Díaz Caballero, de las que son promotores el matrimonio formado por Antonio Díaz y Ana Caballero, junto con sus hijos. "Este museo es un sueño hecho realidad. La Fundación Díaz Caballero ha conseguido dar un lugar privilegiado a los belenes porque aquí cobran una dimensión diferente y brillan con luz propia", explicó el promotor y fundador del Museo de Belenes, Antonio Díaz.
El promotor se mostró ayer muy ilusionado con el arranque de un proyecto por el que lleva bastante tiempo luchando, al tiempo que explicaba que su objetivo es el de poder preservar este arte efímero que suele ser creado cada año y que, de no ser conservado, se perdería, ya que los belenistas cada año hacen creaciones nuevas.
El museo también cuenta con creaciones que han sido diseñadas exclusivamente para este proyecto, como el creado por Antonio Bernal, que recrea una cueva en la que existen diferentes representaciones.
Unas obras en las que la observación se vuelve vital, ya que en cualquier rincón de cada belén puede existir una escena que sorprende al visitante. Desde el museo se muestran satisfechos con la acogida que está teniendo la iniciativa, ya que antes de abrir las puertas ya tenían reservas de un importante número de grupos para visitar las instalaciones, que también cuentan con un pequeño guiño a los aperos tradicionales del campo andaluz y a productos de la zona, contando con una tienda en la que poder adquirir algunos de ellos, como mantecados o aceites.
También te puede interesar
Lo último