Envidia preventiva

Lotería de Navidad: nada peor que le toque a tu cuñado... o a Pedro Sánchez

Unos afortunados ganadores de la Lotería de Navidad.

Unos afortunados ganadores de la Lotería de Navidad.

Queda poco para que se celebre uno de los sorteos de Lotería más esperados del año, el de la Lotería de Navidad. Un sorteo que también es de los más temidos por algo que se conoce como la envidia preventiva, que no es más que ese impulso que nos lleva a comprar el décimo de la empresa o de la peña o del mercado por el '¿Y si les toca y yo no llevo?'.

Esta envidia preventiva a que El Gordo toque sólo a los demás dinamiza el 12% de las ventas en tan sólo las últimas horas, de acuerdo con datos de Loterías Castillo. Según Marcos Bernabéu, gerente de dicha administración: “Mucha gente compra a última hora impulsada por la envidia preventiva. Vienen buscando esos décimos ya agotados, que se han llevado sus amigos o han vendido en el bar de su barrio”.

La peor pesadilla: que le toque al cuñado

Según datos de jugadores del sorteo, un 17% sufre la noche del 21 pensando que el Gordo tocará en un décimo comprado en su entorno con el que no cuentan. Y de entre todas las pesadillas, la peor es que le toque a un cuñado, uno de cada dos jugadores moriría de envidia si El Gordo le tocase a su cuñado, por encima de su jefe con un 20% de los jugadores encuestados.

Pero los celos también se multiplican cuanto más cerca. La mayor pesadilla para el 16 % de los jugadores de lotería sería ser testigo de la fortuna de su mejor amigo. Contra todo pronóstico, los suegros tan solo suman un 11%.

Tampoco queremos que le toque a Sánchez o a Casado

¿Y si El Gordo tocase a alguno de nuestros líderes políticos? La rabia en ese caso es bipartidista. Casi el 80% de los jugadores de lotería se horroriza al pensar que Pedro Sánchez (42%) o Pablo Casado (36%) podrían ser los afortunados premiados. Sin embargo, sólo un 9% y un 12% de los encuestados no soportaría que Inés Arrimadas y Santiago Abascal respectivamente resultasen ganadores.

La Lotería de Navidad desmiente la creencia de que los españoles no somos previsores. El pistoletazo de salida de las ventas de décimos en julio nos coge con ganas de buena fortuna de modo que el verano concentra casi el 20% del total de las compras de los participantes en la encuesta.

Pero hayamos comprado o no lotería, en tan sólo las últimas 12 horas se concentran hasta el 12% de las compras de lotería, un porcentaje en el que coinciden tanto los datos de negocio como las respuestas de los encuestados. El día 21 es así el día del “y si…” en el que no queremos dejar cabo suelto para ser los afortunados, no sólo para que la suerte no nos pase lejos, sino por si queda demasiado cerca.

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